Una estudiante de diseño de la Academia de Diseño de Marbella, España, Monika Kis, desarrolló un bioplástico a partir de cebollas que podría reemplazar tanto al cuero real proveniente de animales como al que llamamos cuero de imitación el cual está fabricado con materiales sintéticos, ambos populares en la industria de la moda y muy perjudiciales para el medio ambiente y los ecosistemas naturales.
Afirma que la gran parte de población utiliza los cubrebocas comunes hechos con materiales dañinos para el planeta y los cuales generan gran contaminación cuando son arrojados en espacios naturales, es por esto que comenzó a ingeniar una idea que aportara una solución para disminuir el impacto negativo.
Las cebollas contienen varias vitaminas, minerales y antioxidantes. Además, son especialmente ricas en vitamina c, un nutriente que interviene en la regulación de la salud inmunitaria, la producción de colágeno y la reparación de los tejidos, al tiempo que protege la piel contra la contaminación y las toxinas. Utilizando la cebolla como ingrediente principal y añadiendo pimienta negra he creado una mascarilla antiinflamatoria que no sólo reduce el acné, sino que también lo trata.