El pasado viernes 31 de octubre, el economista y periodista Alejandro Bercovich presentó su libro “El país que quieren los dueños” en la segunda jornada del IX Congreso Provincial de Educación Pública y Popular – XV Seminario Internacional de la RIOSAL-CLACSO, que se llevó a cabo en la ciudad de Río Grande.
En un momento tan difícil que nos toca vivir a las trabajadoras y los trabajadores, el economista hizo hincapié en sus estudios y análisis sobre la ultraderecha en el poder, tras las elecciones del año 2023.
“Este libro –que nace cuando gana Milei– busca barrer con un tabú que tiene nuestra Democracia desde su origen y es el tabú de hablar de la riqueza y de los dueños” afirmó el economista para dar introducción a su presentación.

Durante la presentación, el economista abordó la situación social y económica que atravesó nuestro país tanto en el 2001, en el 2020 –con la pandemia– y en el 2023 con las últimas elecciones presidenciales e hizo alusión a la categoría de “dueños” y enfatizó en que este concepto engloba mucho más que la noción de elite o establishment, si no que hace referencia a los “50 magnates más grandes de la Argentina”, frente a la pregunta de “qué país quieren”.
“Si los dueños están de acuerdo con que el capitalismo argentino tiene que mudarse de los conurbanos fabriles –donde se emplea a la mayor cantidad de gente en mano de obra–, a la cordillera, a Vaca Muerta, o a la provisión histórica de proteína vegetal que hizo la pampa húmeda exportadora… de algún modo están renunciando a liderar un proceso de desarrollo autónomo de un país que incluye muchas más cosas que la economía: incluye la Universidad Pública, la Educación Pública de calidad, la tecnología integrada con lo productivo –como reafirma en su trabajo el CONICET–, en fin, renunciar a un montón de cosas que hacen de la Argentina lo que es un país muy complejo y muy diverso”, resaltó.
Este desamparo por parte de “los dueños” a un desarrollo local autónomo, no solo hace referencia a un abandono, sino a una especie de disciplinamiento cuya única finalidad es desproveer a la población de los servicios esenciales dignos como lo son la Educación, la Salud y la Seguridad, y a la potestad de realizar su propia planificación y previsión a futuro.
“El estilo de vida que proponen los dueños, pone de manifiesto una desigualdad tan escandalosa que ni siquiera intuimos, porque no llegamos ni a imaginar cómo vive hoy un hiper capitalista”, agregó Bercovich. Y continuó: “Esto nos acerca un poco a ver hasta qué punto estamos desiguales y hasta qué punto la riqueza de unos pocos es lo que nos impone a los demás una vida cada vez de mayores penurias”.
Alejandro Bercovich explicó la importancia de entablar diálogos con las trabajadoras y trabajadores que persisten en votar por los intereses de los dueños, por el egoísmo, por el rencor y por la destrucción de nuestra trama social, para entender “qué es lo que quisieron votar” y así discutir desde un balance político. “Es un momento para poner en valor debates profundos”, afirmó. Y concluyó: “Me llena de orgullo verlos luchar en conflicto, con la frente en alto y en el Fin del Mundo”.
Prensa SUTEF