Ejemplo del crecimiento fueguino

Talentosa, perseverante y ambiciosa de nacimiento, Valentina Romero se consagró campeona argentina en Pre Juvenil, pero ya rindió los exámenes de Juvenil completos y encara el 2020 como Intermedia habiendo aprobado también las pruebas correspondientes.

USHUAIA.- Con el Club Andino Ushuaia como impulsor del desarrollo del Patinaje sobre Hielo desde las épocas de la Laguna del Diablo y apellidos pioneros que sentaron las bases de un desarrollo con aprendizaje constante, el futuro se avizora cada vez más promisorio.
Tras la enorme actuación en el Campeonato Argentino desarrollado en el Luna Park donde se consiguió un récord de medallistas fueguinas con Valentina Romero como campeona argentina de Pre Juvenil Clase B y Paz Bleuer haciendo lo propio en Pre Preliminar Clase B, la invitación formal por parte de la Federación Argentina de Patinaje sobre Hielo para Bleuer de viajar al Dream Program a Corea no hizo más que acrecentar las buenas noticias.
Con un grupo de luchadoras que le hacen frente a las dificultades de no tener pista durante todo el año para entrenar -a diferencia del resto del país- y que se levanta a las 5 de la mañana para poder aprovechar los dos meses y medio que el clima aporta lo necesario para la práctica del deporte, el talento queda en evidencia con los resultados.
Talentosa, perseverante y ambiciosa de nacimiento, Valentina Romero se consagró campeona argentina en Pre Juvenil, pero ya rindió los exámenes de Juvenil completos y encara el 2020 como Intermedia habiendo aprobado también las pruebas correspondientes.
No obstante, apunta los cañones a ser Junior cuanto antes, es que a partir del mencionado nivel podría formar parte de cualquier competencia a lo largo y ancho del mundo, en lo que sería su sueño máximo: representar a la Argentina oficialmente.
“Este año fue mi segundo nacional después de haber debutado el año pasado en Preliminar con el tercer puesto. Ahora subí de categoría y estoy muy contenta de haber logrado el oro. Levantarme a las 6 de la mañana o ir a las 12 de la noche a entrenar, dejando de lado salidas con amigas o ausencias en la escuela, valió la pena”, comenta.
Y agrega en relación a su crecimiento: “Empecé a los 14, transformo mis vacaciones en entrenamientos junto a mis papás que me acompañan a Canadá desde hace dos años y ahora volvemos a viajar para seguir aprendiendo y creciendo. Me encanta lo que hago y tener el apoyo de ellos es muy importante”.
“Formamos un equipo de trabajo estos años con Raúl Portillo quien me prepara físicamente, Arturo Dorella mi osteópata, Klauz mi entrenador y Dolores Cazorla como coreógrafa; además del acompañamiento que siempre tiene el CAU”, dijo, antes de que sus padres recuerden que “también fue importante la colaboración de Juan Carlos Pino y Juan Carlos Arcando, pendientes del desarrollo del deporte”.
El panorama para la patinadora de 16 años avizora el inicio del viaje hacia Buenos Aires este miércoles 25, continuará con su arribo a Toronto (Canadá) el día 29 y ya establecerse para comenzar con el plan de entrenamientos que abarcará del 2 de enero del 2020 hasta el 5 de abril cuando se suban al avión de regreso a nuestro país.
Será junto a los entrenadores olímpicos que la han tenido en 2017 y 2018, hablamos de Andrei Berezintsev e Inga Zusev, quienes son pareja y acumulan más de 16 años de trayectoria como instructores bajo el lineamiento pragmático al que nos tienen acostumbrados los rusos.
“Son muy profesionales en lo que hacen y nos brindaron una visión totalmente diferente del patinaje a nivel mundial. Eso hemos tratado de volcarlo aquí en Ushuaia más allá de las dificultades. Aprendimos muchísimo y queremos que esto siga creciendo”, ampliaron los padres de Romero.
La rutina de entrenamiento consta de clases en hielo y fuera del mismo, con módulos diarios de 45 minutos con 10’ de receso para alimentación e hidratación, los cuales van de lunes a sábados.
El Richmond Training Centre nuclea a los máximos exponentes del patinaje canadiense, compartiendo pista con campeones olímpicos, internacionales y nacionales que dejan a la vista las metas próximas de una fueguina que sueña alto.
La pasión no entiende de límites…

La necesidad de una pista techada

Si hablamos de problemáticas de infraestructura a nivel provincial no quedan dudas de que podríamos armar un listado, pero en base a la historia fueguina, el patinaje tiene su fundamento en haber sido la primera disciplina que se practicó en Ushuaia cuando se congelaba la Bahía Encerrada.
En esta línea habría que ponerla en valor y realmente aspirar a darle curso al proyecto presentado en 2019 para techar la pista “Tachuela Oyarzún”, la única de medidas olímpicas en toda Latinoamérica, no sólo para poder ser el centro turístico deportivo más relevante del continente -excepto USA y Canadá- para el Patinaje y el Hockey sobre Hielo, sino para albergar entrenadores, deportistas y eventos de magnitud internacional.
Se posicionaría a Tierra del Fuego y a Ushuaia en un plano hoy desconocido por el simple hecho de satisfacer una necesidad que tienen los amantes de estas disciplinas.
¿A quién no le gustaría ver a Ushuaia como sede de un campeonato internacional con los mejores exponentes del mundo? ¡Sí, a metros de casa!