Se conoció en las últimas horas la sorpresiva renuncia del presidente del Servicio de Sanidad y Calidad Agroalimentaria –Senasa– Pablo Cortese. Si bien el ahora exfuncionario adujo razones personales, se especula con varios factores que habrían influido en su decisión.
Desde el portal Bichos de Campo se informa que la mayor presión que habría tenido Cortese para tomar esta decisión refiere a las presiones que habría sufrido por la guerra de laboratorios ante la inminente importación de vacunas bivalentes para la fiebre aftosa.
El mismo sitio informó que Cortese recibió una carta del laboratorio Biogénesis Bagó cuestionando el marco legal que habilita la importación de vacunas.
Otro tema de fuerte impacto que le ha tocado sobrellevar a Cortese ha sido la barrera sanitaria con la Patagonia.
El gobierno mediante dos resoluciones, la 180 y la 460 ambas de este año, flexibilizó la barrera que existe con la Patagonia para el ingreso de carne con hueso.
Esto ha molestado fuertemente a productores e industriales de la Patagonia que se manifestaron en contra de la resolución, con el apoyo de Confederaciones Rurales Argentinas CRA.
Ligado a esto, cabe mencionar el discurso del presidente de la Sociedad Rural Argentina SRA Nicolás Pino en el acto inaugural de la Expo Rural de Palermo, cuando se refirió a la aftosa.
Clarín menciona esta alusión de Pino como otro de los factores que habrían influido en la decisión de Cortese.
El dirigente ruralista consideró que el Senasa «debe tener un plan a largo plazo que incluya la definición y diferenciación de estatus sanitario y un poder de intervención adecuado», ya que «en un país exportador no podemos no tener un Senasa de mejor nivel internacional».
Al respecto pidió el compromiso de todos, incluidos los productores, por la «responsabilidad de tener a nuestro ganado trazado con eficiencia para poder responder ágilmente a cualquier problema que se presente».
Con todo, puso el foco en el «poder de control de Senasa en las fronteras y en todo el país» y respecto de la barrera sanitaria que rige entre la Patagonia y el resto de la Argentina, Pino advirtió al Gobierno que «no debe tomar decisiones con respecto a la comercialización de carne que perjudiquen el estatus sanitario de ninguna región del país ni que generen complicaciones en la comercialización interna o exterior de su producción”.
Cortese es un funcionario con más de 20 años de carrera en el Senasa. Precisamente por ese motivo, la designación fue apoyada por todo el espectro político.
Según ultimas informaciones a las que accedió este medio, quien sustituirá a Cortese en el cargo será la Ing. Agr. María Beatriz “Pilu” Giraudo, actual asesora del INTA tras el último cambio jurídico que recayó sobre el organismo.