En audiencia pública, el ministro de Energía Juan José Aranguren ratificó que el Gobierno avanzará con la reducción de subsidios energéticos y aclaró que el objetivo es que en el mediano plazo los usuarios paguen el total del costo de producción del gas.
BUENOS AIRES (NA).- El Gobierno anunció que pondrá «topes» de entre 300% y 500% a los aumentos del gas natural para usuarios que reciban facturas con montos superiores a 250 pesos mensuales.
Así lo señaló el ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren, quien también ratificó la propuesta oficial de aumentar desde el primero de abril un 10% en promedio el precio de gas en boca de pozo, el ítem más importante en las facturas.
Aranguren anticipó esos datos el pasado viernes, al abrir la audiencia pública en la que se terminará de definir el nuevo cuadro de precios del gas natural en el denominado Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST) o boca de pozo.
Aranguren afirmó que el objetivo de su gestión es continuar en el «sendero gradual y previsible de reducción de subsidios» y en paralelo obtener un suministro que sea sostenible en el tiempo y promover la producción local, con subsidios a la demanda y no a la oferta.
El viernes, la audiencia pública para definir el aumento del precio del gas en boca de pozo arrancó a las 9:00 en el Teatro de la Ribera, del barrio porteño de La Boca, donde estaba previsto que se expresen unos 75 oradores, incluyendo los del interior del país a través de videoconferencia.
Aranguren indicó que al llegar a la gestión en diciembre de 2015 recibió un sistema de suministro de gas natural que «era y continúa siendo distorsionado, desigual, injusto y obsoleto», para el que se importa en invierno un tercio del fluido consumido.
Advirtió además que la capacidad de importación está hoy «limitada» porque no hay mayor capacidad de regasificación mientras que «hay un faltante de suministro por parte de Bolivia», y cuando esto ocurre -principalmente en el invierno- se debe cortar el gas a las industrias.
El funcionario indicó que lo «injusto» del actual sistema de distribución es que mientras abastece sólo al 60 por ciento de los argentinos, todos los habitantes contribuyen con sus impuestos a subsidiar ese sistema en un 50% a nivel nacional y en un 81% en la Patagonia.
El 26% de la demanda pertenece a la industria; el 38% a las usinas; el 6% va al Gas Natural Comprimido para los vehículos; los comercios se quedan con el 3%; los horas (residencial) absorben el 24%; y la tarifa social, un 2 por ciento.