Esta semana se resolvería la situación procesal de  los detenidos por el crimen de Juan Carlos Lucena

Los detalles de la investigación en una causa en que están muy comprometidos Javier Eduardo Acosta y Facundo Oscar Mancilla. Las pruebas son irrefutables, entre ellas un video que los identifica. Los acusados enfrentan una causa calificada como “homicidio doblemente agravado por alevosía y criminis causae”.


RIO GRANDE.- La investigación en torno al brutal crimen del jubilado municipal que había salido a comprar a un kiosco de su barrio, ya tiene marcados a los detenidos; Javier Eduardo Acosta de 23 años y Facundo Oscar Mancilla de 21; como los autores del atraco que tuvo un final fatal.

La intención del juez Daniel Cesari Hernández, sería tener resuelta esta semana la situación procesal de los imputados en la causa por el crimen de Juan Carlos Lucena. Es que esta semana termina la feria judicial y su turno, por lo que resolvería la situación antes de entrar en licencia.

En esto es seriamente comprometida la situación de los detenidos  Javier Eduardo Acosta de 23 años y Facundo Oscar Mancilla de 21, quienes asaltaron al hombre que minutos antes había salido de su casa del barrio Textil, a un kiosco sobre calle Anadón.

Lucena no poseía dinero, solo llevaba su billetera con tarjetas, documentos y unas llaves, encontradas en el lugar, ocasión en la que la hipótesis fiscal sostiene que Acosta lo sostuvo por la espalda, dejándolo en estado de indefensión, para que Mancilla lo apuñalara 8 veces.

Una de estas puñaladas fue mortal perforando uno de sus pulmones, lo que le produjo la muerte a poco de llegar al hospital.

Dos cámaras de seguridad muestran a estos dos sujetos escapando del lugar en dirección a los patios internos de Aeroposta, y luego el hallazgo de elementos de la víctima en la casa de estos sujetos, tienen centrada la investigación sobre los mismos.

La fiscal del caso la Verónica Marchisio sostiene la acusación por “homicidio doblemente agravado por alevosía y criminis causae”, ante lo cual ambos sujetos arriesgan una dura condena.


Solo declararon los otros cuatro detenidos

Este serio compromiso procesal quizás haya sido el disparador de que se negaran a declarar, pero si lo hicieron sus cuatro compañeros de causa, los cuales son imputados por el delito de “encubrimiento agravado”, en relación a distintas circunstancias que los vinculan a los instantes posteriores al hecho.

Alberto Omar Torres de 45 años fue detenido en Aeroposta 415, así como su hijastro Leandro Emanuel Acuña, quien reside en el mismo domicilio. Estos dos sujetos permanecerían ajenos al hecho, pero no lograron convencer en sus dichos respecto de porqué Torres a minutos del hecho sacó la basura con un trapo ensangrentado en su interior.

La hipótesis fiscal sostiene que los autores del hecho habrían pasado por esta casa a lavarse, aunque posiblemente estos dos detenidos habrían sido ajenos a lo que había ocurrido, aunque sus actos posteriores fueron realizados con el procedimiento policial ya instalado en todo el barrio.

Torres declaró que la sangre en la basura era de un corte que se había hecho su mujer.

Los otros dos detenidos son Franco Daniel Mancilla, hermano del presunto homicida, y Rodrigo Sebastián Machao, quienes residían en el mismo domicilio de Rosso 570 donde se recuperaron los elementos de la víctima.

Alegaron haber sido totalmente ajenos al hecho, pero se investiga si colaboraron en el descarte de elementos que se tiraron en una mochila a un contenedor, y que fueron recuperados como un cuchillo con sangre y el DNI de la víctima.

Finalmente la defensa de Franco Daniel Mancilla pidió su excarcelación y esta fue denegada.


Pericias para todas las dudas

Ante las versiones brindadas por estos sujetos, ahora la investigación busca confirmar situaciones con vecinos que procederán a brindar testimoniales, ruedas de reconocimiento y una batería de medidas de prueba solicitadas desde la fiscalía.

La fiscal en este sentido ya pidió pruebas de muestras epiteliales y de ADN en todos los elementos incautados, en las manchas de sangre, a fin de confirmar a quien pertenece la misma, y a partir de ello comenzar a encajar piezas de este rompecabezas en el que no se logrará explicar la saña homicida con que se actuó de manera irreparable.

Esta semana será clave en las determinaciones a adoptar por el juez en relación a estas medidas de prueba solicitadas, algunas de ellas con definiciones posteriores al momento de tener que dictar un pronunciamiento de primera instancia.

Fueron vitales las primeras intervenciones policiales, incautando en poder de estos sujetos pertenencias de la víctima que intentaron descartar.