En el marco del relevo de los Puestos de Vigilancia y Control de Tránsito Marítimo en la región austral, el patrullero oceánico ARA “Piedrabuena” realizó el traslado de personal y material destinados a continuar con los trabajos de puesta en valor del Puesto “Bahía Buen Suceso”, en Península Mitre, y del Apostadero Naval “Comandante Luis Piedrabuena”, en Puerto Parry.
USHUAIA.- Designado como buque de estación del Comando del Área Naval Austral, el ARA “Piedrabuena” fue responsable de transportar al personal designado y a los materiales necesarios para asegurar el avance de las tareas planificadas.

En el Puesto “Comandante Luis Piedrabuena” se efectuó el desembarco y acopio de materiales de construcción para las obras previstas para enero de 2026. Para estas tareas se contó con el apoyo de unidades del Batallón de Vehículos Anfibios N°1, dependiente de la Brigada Anfibia de Infantería de Marina, lo que permitió optimizar las operaciones logísticas en zonas de difícil acceso.
Los Vehículos Anfibios Logísticos (VAL) fueron trasladados a la isla a bordo del aviso ARA “Puerto Argentino”, previo a iniciar la Patrulla Antártica Naval Combinada. En comparación a los botes tradicionales, los VAL poseen una capacidad de carga significativamente superior y, por su versatilidad, permiten proyectar mayor cantidad de material hacia los sectores de trabajo y almacenamiento. Permiten no solo contribuir a operaciones militares, sino también a las dedicadas a la protección civil, como tareas de apoyo a la comunidad y asistencia ante emergencias.
Posteriormente, el patrullero se dirigió a Bahía Buen Suceso -donde continúan los trabajos en la estructura y remodelación integral del puesto de vigilancia-, con el objetivo de efectuar el recambio de dotaciones y el aprovisionamiento de víveres.

El trabajo sostenido de la Armada Argentina en estos puntos estratégicos reafirma el compromiso del país con la defensa de la soberanía, la protección de los intereses nacionales y la preservación de los espacios marítimos.
Bahía Buen Suceso
Las obras de puesta en valor comenzaron a principios de noviembre y buscan fortalecer la vigilancia y el control del tránsito marítimo en aguas jurisdiccionales, contribuyendo al ejercicio efectivo de la soberanía. La renovación de sus instalaciones permitirá brindar mejores condiciones de habitabilidad y trabajo a la dotación destacada, consolidando la presencia del Estado en un área clave del Atlántico Sur.
Para el inicio de estos trabajos, se contó con el apoyo de distintas unidades destacadas como el patrullero oceánico ARA “Contraalmirante Cordero”, helicópteros Sea King de la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros, botes del Batallón de Infantería de Marina N°4 y, actualmente, el patrullero oceánico ARA “Piedrabuena” junto a los VAL del Batallón de Vehículos Anfibios N°1.