PARÍS (AFP).– Cristiano Ronaldo ganó ayer su cuarto Balón de Oro, como recompensa a un año increíble marcado por su segundo título de Liga de Campeones con el Real Madrid y el primer triunfo internacional con Portugal, al conquistar la Eurocopa 2016.
El modo de designación del Balón de Oro ha cambiado este año. Ya no es la FIFA la que entrega el trofeo, sino el semanario France Football, como en el pasado, tras la votación de periodistas de 173 países.
El resultado es el mismo que en 2008, 2013 y 2014. Ronaldo, de 31 años, logra por cuarta vez la prestigiosa recompensa.
“Es un nuevo sueño que se hace realidad. Nunca habría imaginado conquistar cuatro veces el Balón de Oro”, declaró el portugués.
“Cuando es la primera vez la emoción es siempre particular pero no podría decir que el sentimiento es el mismo, una primera vez es siempre una primera vez en todos los temas”, respondió el portugués cuestionado sobre sus sentimientos respecto al logrado en 2008.
“Lo que siento hoy se parece a 2008, trabajo para ser siempre el mejor, al precio de grandes sacrificios”, añadió.
En el palmarés, está detrás del argentino Lionel Messi, su rival del Barcelona, que ganó el trofeo cinco veces (2009, 2010, 2011, 2012, 2015).
Pero aunque Messi ganó la liga española con el Barça, no hubo pelea este año.
El 28 de mayo, CR7 ganó la tercera Liga de Campeones de su carrera, la segunda con el Real Madrid (2014 y 2016), para completar la lograda con Manchester United (2008).
Ronaldo terminó como máximo goleador de la prueba por cuarto año consecutivo, con 16 goles en 12 partidos, y posee el récord de tantos inscritos en la competición europea (96).
La primera con Portugal
Menos de dos meses más tarde, un 10 de julio en el Stade de France, el capitán portugués ganó el primer trofeo internacional de la historia de su país, la Eurocopa 2016 frente a Francia, gracias a un gol de Eder en la prolongación.
Fue un guion increíble para él. Pero en la final de la Eurocopa tuvo que dejar el terreno de juego, lesionado, en el minuto 25.
Después regresó de los vestuarios al banco para animar a los suyos y dar consignas.
Con 88 millones de dólares de ingresos en 2016, es también el deportista mejor pagado del planeta, según la revista Forbes.