PARÍS (AFP).– En un mano a mano por el título mundial, Sébastien Ogier (M-Sport/Ford) y Thierry Neuville (Hyundai) son los favoritos del Rally de Cerdeña, séptima de las 13 pruebas de la temporada 2017, desde hoy al domingo en la isla italiana.
A finales de 2016 Volkswagen sorprendió al mundo del automóvil al anunciar su retirada del Mundial, debido a las consecuencias del escándalo de los motores trucados.
De los tres pilotos que tenía la escudería alemana, el vigente campeón mundial Ogier encontró un volante en M-Sport y el finlandés Jari-Matti Latvala en Toyota.
Pero el noruego Andreas Mikkelsen, tercero en el Mundial 2016 tras Ogier y Neuville, no corrió la misma suerte. Se tuvo que contentar hasta ahora con tres pruebas en la categoría inferior (WRC2), al volante de un Skoda Fabia R5 (7º y primero de WRC2 en Montecarlo y en Córcega, abandono en Portugal).
Con su copiloto y compatriota Anders Jaeger reemplazarán al francés Stéphane Lefebvre y Gabin Moreau este fin de semana en Italia con un C3 WRC de Citroën, que han descubierto en las últimas semanas en el sur de Francia.
Temperaturas altas
Entre los favoritos, el recorrido accidentado de Cerdeña, uno de los más exigentes de la temporada para los pilotos, las escuderías y los mecánicos, Ogier presenta su candidatura al conocerlo a la perfección. Además se ha impuesto en tres ocasiones (2013, 2014 y 2015).
“Las temperaturas que vamos a tener son probablemente las más altas del año y debemos estar preparados”, dijo Ogier, ganador en Portugal a mediados de mayo, que tiene 22 puntos de ventaja en la general con Neuville.
