River derrotó a Boca y le puso suspenso al campeonato

BUENOS AIRES (NA).– En uno de los Superclásicos más abiertos y vibrantes de los últimos tiempos, River superó ayer por 3 a 1 al líder Boca en un vibrante partido válido por la cuarta fecha del torneo de Primera División, que tendrá una definición con suspenso en la lucha por el título.

Gonzalo Martínez, Lucas Alario y Sebastián Driussi marcaron para la visita, mientras que Fernando Gago, de tiro libre, colocó el descuento en el epílogo del primer tiempo.

Con este resultado, el conjunto de Núñez quedó a cuatro unidades -con un partido pendiente ante Atlético Tucumán- y benefició a San Lorenzo, que queda a tres puntos.
Dos golpes en 9 minutos

Boca avisó con un remate de Benedetto desde afuera del área, pero su mediavuelta se fue cerca del poste derecho de Batalla, pero contestó River con una buena contra encabezada por Alario, quien le ganó a Vergini, y cedió a Driussi por el medio, pero el remate del delantero lo controló a pie firme Rossi.

Gallardo debió modificar los planes iniciales a los pocos minutos, debido a la lesión de Casco, por el que entró el uruguayo Camilo Mayada al lateral izquierdo.

Sobre los 6 Pavón remató a la salida de un córner, en una jugada preparada, y el balón se fue cerca del poste izquierdo de Batalla, que nada podía hacer.

Pero un ataque bien manejado por los “millonarios” ubicó a Driussi por el costado derecho, el centro cayó en el segundo palo donde Pity Martínez ensayó una volea espectacular para derrotar a Rossi y causar la primera sorpresa en la Bombonera.

En desventaja Boca debió acostumbrarse a un nuevo panorama ante la lesión de Centurión y el ingreso de Walter Bou.

Luego del gol, el Pity Martínez desbordó por la izquierda, dejó en el camino a Peruzzi y el centro atrás lo conectó Nacho Fernández, pero el balón cruzó todo el arco de Rossi y se fue por el otro poste.

Boca dio una muestra nefasta de lo que es retroceder tras un ataque mal ejecutado y River explotó al máximo esa falencia, cuando otra vez Martínez encabezó el avance y cedió a Alario, quien de zurda definió y Rossi no logró despejar el balón, para festejar el segundo gol “millonario”.

En el cierre del primer tiempo, un tiro libre de Gago tenía destino de centro, en el segundo minuto adicional, pero Pintita vio adelantado a Batalla y pateó al arco, colocando el balón lejos del alcance del portero.
Boca, dominio a medias

En el complemento, el Xeneize salió decidido a llevarse por delante al Millonario, pero las dificultades en la zona media no se fueron y a los 11 Nacho avisó por la derecha y Rossi debió mandarla al córner.

A los 17 casi Boca llega al empate luego que un rebote fortuito le quedó a Benedetto y ante una mala salida de Batalla el delantero lo eludió y definió desde un ángulo muy cerrado, pero Martínez Quarta evitó el gol enviando el balón al córner.

River denotó el cansancio físico y el esfuerzo de doblegarse para tapar las pocas ideas que Boca exhibió y en ese sentido Pity Martínez tomó malas decisiones y por eso Gallardo lo cambió por el uruguayo Mora.

Barros Schelotto mandó al colombiano Barrios y sacó a Pérez que nunca pudo ser alternativa y así Boca logró un poco más de profundidad.

A los 29 muy buen centro de Pavón desde la derecha, Benedetto casi convierte, pero el cabezazo se fue por encima del travesaño Benedetto, y el equipo del Mellizo parecía estar en partido para poder doblegar a un River que no recobraba el aire.

El Millonario lo pudo haber definido con una contra que encabezó Ponzio, pero Auzqui definió apenas desviado el “mano a mano” con Rossi, cuando Boca ya veía escaparse el partido.

Boca mostró actitud, mas no tantas ideas, para ir a buscar el ansiado empate y a los 43 Batalla se redimió del error en el gol de Gago y le tapó un remate a Benedetto primero y consecutivamente a Bou para ahogar toda esperanza local.

Un mal pase de Gago a Fabra –lo mejorcito de Boca- le permitió a Nacho Fernández robar el balón y encabezar el contraataque, cedió al medio para Driussi y el goleador no perdonó a Rossi y estampó el definitivo 3 a 1, que puso el torneo al rojo vivo.

El Millonario aprovechó una chance inmejorable para seguir con esperanzas en el campeonato.