2016, el invierno “menos nevador” de los últimos años

El primer semestre cerró con uno de los registros históricos más bajos: sólo 50 centímetros de nieve cayeron hasta el 31 de julio. “Ha sido un invierno poco nevador hasta ahora, pero no podemos determinar cómo terminará”, dijo el meteorólogo Gabriel Karamanián sobre las nevadas que tímidamente van comenzando a caer sobre Ushuaia. El balance “preocupa” al sector turístico.
USHUAIA.- Los datos obtenidos en la Estación Meteorológica CADIC a través del Servicio de Información Ambiental y Geográfico (SIAG) reflejan que la nieve caída hasta el 31 de julio de 2016 ha sido significativamente menor que el promedio registrado desde 1993: solo 50 centímetros de nieve durante los primeros seis meses del año.

El mes de junio en particular ostentaba como máximos registros la nieve caída en 1995 y 2002, con 1,03 metros y 2012 con casi 1,07 metros. Apenas un año atrás, junio de 2015 superó dichas marcas, alcanzando los 1,09 m, la máxima medición desde 1985 para dicho mes. Mientras que este año junio registró la caída de sólo 1 centímetro de nieve.

Los 50 centímetros de nieve acumulados en el primer semestre de 2016 están lejos de lo que ocurrió apenas el año pasado -que se ubicó entre los años más nevadores de los últimos veinte- con una acumulación de 1,716 metros en el mismo período, comparable con los valores registrados en 1995 y 2002.

Cabe recordar que desde que se contabiliza la precipitación nival en la Estación Meteorológica CADIC el año que registraba la nevada más importante fue 1995, con 3,70 metros, seguido por 2002, con una marca de 2,70 metros.

¿Qué pasará con la nieve? Ésa es la pregunta que se hace el mundo ligado al turismo. Gabriel Karamanián, meteorólogo de Ushuaia, dijo que “en principio ha sido hasta ahora un invierno poco nevador, pero no puedo afirmarlo desde el punto de vista estadístico porque todavía queda parte de agosto y parte de septiembre. Si caen dos nevadas más importantes estamos casi en los valores anuales; no se puede afirmar nada hasta que no termine”.

La explicación a un primer semestre escaso en nieve tiene dos partes, señaló el meteorólogo: “En primer lugar hay que tener en cuenta lo que no pasó, que hace que haya nevadas: carecimos de masas de aire polar sobre el sur de la Patagonia, especialmente en Tierra del Fuego, que todos los años se dan en este época, y este año fue una sola hace pocos días atrás”.

“Qué pasó con esas masas de aire polar, eso es lo que no tengo respuestas, habría que hacer un trabajo de investigación que puede llevar mucho tiempo hasta determinar por qué este año no ingresaron esas masas de aire”, indicó.

Sin embargo, aunque no tengamos un invierno caracterizado por las nevadas el especialista asegura que -a priori- tampoco ha sido un “invierno caliente”. De hecho, si caracterizamos el invierno “tiene que ver más con un intervino seco; se han registrado temperaturas que están dentro de los promedios propios del invierno”, agregó.

Las nieblas son características del invierno sobre todo en la zona de Río Grande, generalmente los vientos del este, noreste y sureste traen aportes de humedad y producen bancos importantes en todo el norte de la isla. Pero este año, la niebla tuvo una presencia mucho más marcada.

“La característica de este año es falta de vientos del sector sur con nevadas, y gran cantidad de frecuencia de vientos con componentes del este, por eso a Río Grande le llama la atención este año la gran cantidad de niebla”, expresó Karamanián.

¿Qué pasará en los próximos días? “A la débil nevada de este jueves, se espera que para los próximos días, sábado y domingo vuelvan los vientos del este, con nevadas no sobre la ciudad de Ushuaia sino arriba de los 600 metros. Va a haber nevadas en la zona del Garibaldi o el Cerro Castor y en los Valles, pero es raro que se den sobre la ciudad, por lo menos hasta el domingo”, adelantó el meteorólogo.

Las estadísticas pueden variar de un año a otro, solo hace un año cayeron casi 3 metros de nieve durante el invierno. “Si nos remontamos a los viejos pobladores de la capital provincial sí nos van a decir que nieva mucho y esto tiene una explicación, el calentamiento global es para todos, y a la larga habría que esperar que las precipitaciones níveas vayan siendo cada vez menores. El calentamiento global se nota, en los últimos 50 años las temperaturas promedio de Tierra del Fuego fueron ascendiendo”, cerró.
Preocupación por el turismo

Más allá de las estadísticas, la situación preocupa al sector turístico que se vio afectado durante el primer semestre, en coincidencia con la falta de nieve, a pesar de que tímidamente las nevadas en las zonas montañosas van mejorando el panorama para lo que queda del invierno.

Este año la temporada arrancó recién después de la primera semana de julio, y muchas de las postales de quienes visitaban el Cerro Castor y otros centros invernales – incluso hasta pocos días atrás- eran de pistas de esquí donde prevalecía el hielo y las máquinas que fabrican nieve no alcanzaban a cubrir.

“Hay una preocupación del sector que se da no solo por la falta de nieve sino también por la retracción del mercado interno que se viene dando a nivel general por las distintas situaciones económicas que atraviesa el país e inclusive la misma retracción lógica que tuvo el mercado brasilero”, dijo el secretario de Turismo de la Municipalidad de Ushuaia, Juan Cherañuk en Radio Nacional Ushuaia.

Y remarcó en este sentido que “los dos países hacen que la temporada invernal de Ushuaia sea exitosa o no, entonces la situación económica de ambos países sumado a una disminución de la nieve hacen que sea un combo importante para una ciudad y un destino como Ushuaia que es aerodependiente”.

En este contexto, destacó que una familia que está resolviendo a dónde va a vacacionar “decide que si no hay nieve no viene a Ushuaia se va a otro lugar, esto se vio no solo en Ushuaia sino también en otros centros de esquí que vienen atrasados en relación a la nieve, al movimiento de pasajeros y creo que Ushuaia no está ajena a estas distintas situaciones de crisis que son contingencias”.

“Lo que ocurre con la nieve es difícil porque es algo que no podemos manejar, los centros invernales fueron los mayores perjudicados, en días donde podrían haber trabajado a full no lo pudieron hacer como los últimos días de julio y eso va a repercutir no solo en la cuestión económica sino también en el movimiento general de la actividad”, evaluó.

En el sector turístico, aguardan que agosto y septiembre puedan mejorar el promedio de los niveles de nieve registrados durante el primer semestre del año. (Foto: Facebook, En Ushuaia Fin del Mundo).
En el sector turístico, aguardan que agosto y septiembre puedan mejorar el promedio de los niveles de nieve registrados durante el primer semestre del año. (Foto: Facebook, En Ushuaia Fin del Mundo).