La especialización estuvo dirigida a cursantes nacionales y extranjeros que se desenvolverán en operaciones y navegaciones polares.
BUENOS AIRES (La Gaceta Marinera).- El viernes se llevó a cabo la ceremonia de finalización de la edición XXXVI del curso para buques que operen en aguas polares “Capitán de Navío Vicente Manuel Federici”.

El acto tuvo lugar en la Escuela de Ciencias del Mar (ESCM), sede educativa universitaria, desde donde se dictaron las dos etapas de la capacitación: básica y avanzada, de las que participaron oficiales de las Armadas de cinco países extranjeros: Bulgaria, Chile, España, Italia y Uruguay, junto con oficiales de la Armada Argentina y de la Marina Mercante Nacional.
La ceremonia fue presidida por el Director General de Educación de la Armada, Contraalmirante Juan Carlos Romay. Asimismo, se contó con la presencia del Comandante Conjunto Antártico, Comodoro de Marina Maximiliano Mangiaterra, acompañado por el Director de la ESCM, Capitán de Fragata Guillermo Daniel Ortega.
Respecto a esta nueva edición del curso, el Contraalmirante Romay destacó la amplia convocatoria de profesionales nacionales y de oficiales navales de países amigos, lo que “proporcionó una sinergia valiosa y fortaleció los lazos de cooperación y amistad”.
Agradeció, además, la participación y la confianza depositada en la Armada Argentina y les deseó a los cursantes mucho éxito en su futuro profesional. “Llevar a cabo este curso representa una gran satisfacción”, expresó el Director General de Educación de la Armada y añadió que en el contexto actual resultaba fundamental fortalecer la formación, la protección y el cuidado del medio ambiente en aguas polares.
Por su parte, en su discurso de cierre, el Director de la Escuela de Ciencias del Mar afirmó que el curso había demostrado ser “más que un programa académico. Es una instancia integral de formación que combina rigurosidad teórica, práctica operativa y compromiso institucional, preparando a los cursantes a enfrentar los desafíos que impone la navegación en zonas polares”.
Durante el acto se reconoció el esfuerzo y compromiso de los cursantes, y se procedió a la entrega de diplomas a los graduados, entre los que se encontraba el Capitán de Fragata Luis Sierra Farías de la Armada de Chile.
“La Antártida es un continente de condiciones muy dinámicas, con factores variables que ponen a prueba la capacidad de adaptación y resiliencia de los equipos humanos. Por ello, estas instancias académicas son fundamentales, no solo por la transferencia de conocimiento, sino también por la experiencia compartida por el cuerpo académico y profesores, quienes poseen un valioso conocimiento de las aguas del continente antártico”, destacó el Capitán de Fragata Sierra Farías, egresado de la etapa avanzada del curso.
“Los saberes adquiridos contribuyen de manera directa al quehacer de quienes se desempeñarán en operaciones, navegación y, eventualmente, en funciones de mando en la Antártida”, resaltó el oficial chileno.
Por su parte, el Teniente de Navío Gonzalo Yoel Gimeno de la Armada Argentina, subrayó que “capacitarse sobre la reglamentación es clave para asegurar la seguridad del personal militar en zonas polares”. Además, resaltó que el nivel de formación adquirida es equiparable al del resto del mundo. “Convivir con fuerzas extranjeras fue una experiencia maravillosa. Gracias a la Armada conocí otras Marinas y culturas”, concluyó.
Bajo estándares internacionales
Como cada año la especialización, a cargo de docentes y profesionales de la Armada Argentina, tuvo como objetivo dotar a los participantes de competencias recomendadas por la Organización Marítima Internacional (OMI), ajustándose a las exigencias requeridas en el Convenio Internacional sobre Normas de Formación, Titulación y Guardia para la Gente de Mar y su correspondiente Código de Formación, incluidas las Enmiendas de Manila de 2010.
Asimismo, y con el propósito de garantizar operaciones seguras y responsables en aguas polares, la cursada incorporó prácticas ajustadas a las disposiciones del Código Polar y al marco legal internacional, incluido el Sistema del Tratado Antártico.
La instrucción incluyó lineamientos de seguridad laboral, prevención de la contaminación y reducción de riesgos ambientales. Estas prácticas se realizaron en el simulador de navegación con módulo de hielos, ubicado en la Escuela Nacional de Náutica.