PARÍS (AFP).– Argentina ganó 49-31 a los Barbarians, selección formada por jugadores internacionales, ayer en Twickenham, en el último partido del año para los Pumas, en el que el segunda línea sudafricano Bakkies Botha cerró su carrera profesional.
Los Pumas, semifinalistas de la última Copa del Mundo, lograron siete tries contra cinco de los Babaas, el último obra del sudafricano Victor Matfield, que se retira de la esfera internacional, tras firmar para esta temporada con el Northampton.
Apenas 20 días después de lograr la cuarta posición en el último Mundial, unos Pumas renovados pusieron fin a una exitosa temporada (tercer puesto en el Rugby Championship además de la semifinal mundialista).
El partido comenzó con un try de los Barbarians, anotado por el australiano Tevita Kuridrani (7), pero los Pumas respondieron rápidamente con un ensayo de Facundo Isa y pasaron a dominar el marcador con otro try de Santiago Cordero.
Argentina logró otros dos tries antes del descanso, por medio del full-back Ramiro Moyano (27) y otro de Cordero (39), a los que se sumaron las conversiones de un acertado Nicolás Sánchez para llegar a la pausa con una cómoda ventaja de los sudamericanos (28-12).
En el segundo tiempo, que sirvió para despedir a Matfield y Botha, los ataques se impusieron a las defensas y los dos equipos anotaron tres tries cada uno (por los argentinos lo hicieron Landajo, De la Fuente y Sánchez), por lo que la victoria no se escapó a los hombres dirigidos por Daniel Hourcade.