Una mujer que venía a Tierra del Fuego está varada en Córdoba desde el domingo

Silvia esperaba que su mamá llegara de Córdoba el domingo. Sin embargo, después de una confusa situación en la que Nina no pudo subir al avión, la dejaron ahí en el Aeropuerto de Córdoba, esperando la reprogramación de su vuelo. Muchísimas irregularidades formaron parte de una situación que podría derivar en una demanda judicial por daños.

RIO GRANDE.- La mamá de Silvia tiene 62 años, y como cada año, viaja desde San Luis a Tierra del Fuego para visitarla. El domingo cuando fue a abordar el avión que la traería desde el Aeropuerto de Córdoba hasta el de Ushuaia, el personal de aerolíneas no le permitió subir al avión, alegando que no se encontraba apta para viajar. Desde ese momento, Nina Lance está varada en el aeropuerto. Su hija, que aún la espera en Río Grande, decidió denunciar el problema en la radio Aire Libre, como una medida desesperada, ante la falta de resultados.

Lejos de ser la historia de una película, Nina Lance, la mamá de Silvia, debió quedarse en el Aeropuerto de Córdoba; “Mi madre está ahí desde el domingo a las 10:30. En el momento en que ella fue a hacer el despacho del equipaje, para abordar el vuelo que salía las 12:30 desde Córdoba, hacia Ushuaia”, relató Silvia Santos, hija de Nina, en diálogo con diario El Sureño.

“Ella venía para hacerse un chequeo médico, que lo realiza todos los años, que se lo hace acá, porque estamos nosotros y la acompañamos. Se queda un mes acá en la ciudad, y después vuelve, con el viaje primero a Córdoba, y después a San Luis”, explicó Silvia.

Según lo que Nina pudo explicarle a su hija, la negativa para abordar el avión se debió a que la vieron rengueando: “Fue una supervisora la que le dijo que ella no podía abordar el avión así, con el pie que tenía; porque ella veía que no podía sentarse bien y no podía caminar. Pero era sólo porque en el viaje anterior desde San Luis mi madre había pisado mal, y estaba un poco dolorida, nada más. Pero cuando ella fue atendida por el médico el lunes a la tarde, él dijo que no tenía nada, que estaba apta para viajar, tanto vía terrestre, como por avión -detalló la mujer-. Encima me pedían que, si llegaba a autorizar el médico de Aerolíneas, para que ella viajara, que tenía que pagar una penalidad de siete mil pesos de pasaje. Pero yo me negué, todo el tiempo, porque eso ya no corre por cuenta mía, porque la responsable no fui yo, ni la pasajera llegó tarde a perder un vuelo; la responsabilidad ya cae sobre Aerolíneas Argentinas”.

Finalmente, a Nina le dieron asiento en un vuelo, pero recién para el 17 de agosto: “Yo igualmente, le dije a Aerolíneas, que yo necesito un vuelo para hoy mismo, porque ella no puede seguir más tiempo ahí, esperando en el Aeropuerto, hasta que ellos lo dispongan. Me dijeron que no tenían vuelos, porque hay un solo vuelo que viene desde Córdoba, y nosotros sabemos que eso no es así, porque los vuelos salen continuamente de Córdoba a Ushuaia”, sostuvo Silvia.

A pesar de que fue la empresa la que ocasionó que Nina no viaja como estaba previsto, no le proveyeron de alojamiento, no cubrieron sus gastos alimenticios, y hasta se negaron a hacerla revisar por un médico en el momento de negarle el subir al avión: “Nosotros sabemos que hay médico en el aeropuerto porque siempre hay control de sanidad, o por cualquier cosa que suceda con un pasajero. Pero le dijeron que no había médico que pudiera llenarle un formulario que ellos le estaban solicitando en ese momento. Porque la idea de mi mamá era seguir viajando, ella no quería perder su vuelo, pero como ellos le salieron con esto, terminó perdiendo el vuelo”, relató Silvia. Y agregó: “Yo estuve desde el día lunes, yendo al aeropuerto, y me decían que tenía que esperar 48 horas para que el médico de Aerolíneas autorizara el viaje a mi mamá, que no es una persona enferma, es algo de locos pero fue así. Recién cuando llamé a los medios y lo hice público, la supervisora me reprogramó el vuelo”.

La prioridad para Silvia hoy es que su mamá llegue a Río Grande lo antes posible, pero aseguró que seguirá la vía que corresponda para que su madre sea compensada por el momento que pasó: “Ahora cuando ella está llegando el viernes, voy a esperar que pase un poco esto, y el día lunes me estaré presentando con el Dr. Rodas, y presentaré una demanda civil contra Aerolíneas Argentinas, por la pérdida de tiempo, por el mal momento que pasó la familia; aparte los gastos que surgieron porque ella se tuvo que manejar en taxi en Córdoba para pagar una consulta, ir a ver una clínica, todo sola, porque ella está sola en Córdoba. Todo a la espera de que ellos le den una respuesta de su vuelo”.

“Si realmente mi mamá hubiera estado tan enferma no seguiría esperando ahí en el aeropuerto de Córdoba, es algo lógico de darse cuenta no hace falta ser médico. Pero hasta el mismo médico me dijo que está dispuesto testificar porque él mismo me dijo que desde la empresa querían que falsee una enfermedad, cuando él vio a la paciente estable y sin problemas de salud. Él llenó el formulario que pedía Aerolíneas Argentinas, y le dio además un certificado en el que consta que la paciente que él examinó está apta para viajar. La verdad que yo no quería ir a los medios y hacer algo tan grande de esto, pero es mi madre y también tengo miedo que vuelva a pasarle a otras personas”, concluyó Silvia.