Así lo comunicó la presidenta del cuerpo, Mónica Urquiza minutos antes del comienzo del encuentro. Sin embargo, desde el gremio negaron que estuvieran de paro y pidieron “transparencia sobre las verdaderas razones de esta decisión”.
USHUAIA.- Mediante resolución 382/25, la presidenta de la Legislatura de la Provincia, Mónica Urquiza, dispuso ayer la suspensión de la Sesión Ordinaria que estaba pactada para las 11:00 horas de este miércoles, 19 de noviembre, aludiendo a medidas de fuerza de los empleados legislativos.
En la resolución, se señala que el gremio de APEL (Asociacionismo de Personal Legislativo), informó el 18 de noviembre sobre la realización de medidas de fuerza, consistente en asambleas que afectan el normal desarrollo de las actividades de la Legislatura de la Provincia.
Desde la Presidencia se informó que hubo un encuentro tal como lo solicitó la entidad gremial, en la que no se pudo llegar a un acuerdo y que este miércoles, en una asamblea reunida en el Recinto de Sesiones, los empleados decidieron continuar con las medidas de fuerza.
“En virtud de ello, esta Presidencia continuará con las negociaciones a fin de llegar a un acuerdo definitivo”, indica la resolución en la que se establece que “resulta necesario la suspensión de la Sesión Ordinaria convocada para el día de la fecha, a las 11:00, según lo que se había establecido en la Resolución de Presidencia 361/25”.
Tras la comunicación oficial de la presidencia, el secretario general de APEL, Jorge Brúa, rechazó que el gremio haya provocado esta medida y pidió claridad sobre la decisión de la Vicegobernadora de suspender la actividad parlamentaria, cuyo anuncio -dijo- “llama la atención por la rapidez” con que se comunicó.
En declaraciones a Radio Fueguina, Brúa insistió en que los trabajadores se encontraban en asambleas permanentes -una herramienta interna de debate sindical- y que no estaban llevando adelante “ninguna medida de fuerza”.
Brúa subrayó que “APEL no aceptará que se la responsabilice por la suspensión de la sesión” y reclamó transparencia sobre las razones que motivaron la decisión de la Vicegobernadora.
Por la ventana
En la sesión suspendida y que aún no tiene nueva fecha de convocatoria, estaba prevista la votación del proyecto de Ley para la reforma de la Ley 1355, que prohíbe la actividad salmonera en aguas abiertas, un proyecto que según el legislador Jorge Lechman, “ingresó por la ventana”.
Ayer Lechman ratificó su voto negativo y afirmó que no acompañará una iniciativa sin sustento científico, para evitar decisiones que puedan perjudicar a los fueguinos y a las generaciones futuras.
El parlamentario remarcó que el proyecto “ingresó por la ventana”, sin audiencias técnicas, sin presencia de inversores ante las comisiones y sin estudios de impacto ambiental concluyentes. Afirmó que esas omisiones debilitan el proceso legislativo y no permiten evaluar de manera responsable los riesgos y beneficios.
En esa línea, indicó que dentro de la Legislatura persisten interpretaciones divididas sobre la regularidad del trámite, sin embargo insistió en su postura y subrayó que “esos elementos son indispensables para un debate legislativo serio”.