RIO GRANDE.- La referente de Cambiemos, Lucila Apolinaire y el convencional radical, Germán Núñez, expresaron su descontento con la decisión de la dirigencia de la UCR y de Cambiemos de conformar un frente que se identifica como Ser Fueguino, con la finalidad de desprenderse de la figura del presidente Mauricio Macri.
Apolinaire desmintió que integre una fórmula con José Estabillo por el frente que conformó la cúpula radical y los referentes del macrismo. “No comparto los mismos principios y valores que mueven a esta gente que tan fácilmente se abrieron de Cambiemos y crearon el espacio Ser Fueguino, es más de la vieja política”.
La compañera de lista de Héctor Stefani, cuando éste se presentó como candidato a diputado, dijo que “quizás algún día esta gente se dé por aludida y dé un paso al costado, dejando lugar a una nueva generación de políticos que tengan como misión trabajar por el bien común y que entiendan que ser político es ser un servidor público”.
Por su parte, Germán Núñez, quien en los últimos dos años se puso a trabajar con la intención de ser candidato a concejal por esa fuerza política, quedó marginado de poder participar como consecuencia del acuerdo que hizo el partido centenario con Cambiemos, sellando una alianza para competir en las elecciones provinciales sin mostrar renovación en sus cuadros.
Núñez criticó lo que surgió a través de la “dedocracia”, señalando que “somos un grupo de amigos que con ingenuidad casi adolescente, pensamos que podíamos construir desde los ideales, valores y creencias de la honestidad y el trabajo digno sustentable para todos. Trabajamos desde afuera de cualquier estructura creyendo que era la manera más leal para quien quiera sumarse. Parados en creencias e ideologías partidarias y de militancia, pero no lo que hacen hoy por hoy que solo es antidemocracia. Democracia sería que el pueblo elija y lo único que elegimos son los que los “dueños” de los partidos pretenden que elijamos. Quisimos presentar una lista pero las reglas de juego estaban armadas para ellos (los mismos de siempre, claro está)”.
Por último expresó: “Estoy con un sabor amargo de ni siquiera poder participar y que todo fuera armado para ellos. Eso que a veces escuchás es real, ellos manejan el poder y las reglas de juego. No me despido, solo les digo hasta algún otro momento donde ojalá las reglas sean justas, democráticas y de verdadera inclusión, algo que acá no pasó”.