MAR DEL PLATA.- Los elencos femeninos orientados por Anahí Vigil concluyeron su participación en la presente edición de los Juegos Nacionales Evita con la obtención de la medalla de plata en la rama Sub 14, tras caer frente al buen equipo de Buenos Aires, por 2-0, en el compromiso final disputado en las instalaciones de Punto Sur, complejo que está ubicado en plena zona portuaria marplatense.
Justamente, las primeras en saltar a la cancha fueron las integrantes del segmento mayor, el Sub 16, que tenían como meta alcanzar el tercer lugar de las colocaciones finales. Sin embargo, el conjunto de la provincia, integrado por las jóvenes de la Escuela Municipal de Ushuaia, no encontraron el rumbo del partido ante el aguerrido elenco entrerriano y cedieron por 3-1.
Las chicas se marcharon al entretiempo con la ilusión de remontar el pleito. Caían parcialmente por 2-0, y previo a la expiración del primer tiempo, las fueguinas achicaron la brecha y se pusieron a tan solo un gol de diferencia: 2-1 cuando se cerró la primera etapa de juego.
Pero cuando se había generado el atisbo de reacción, y todo hacía pensar en la llegada del empate, con un tiro en el travesaño incluido, Entre Ríos selló el resultado y las esperanzas fueguinas.
La final ante Buenos Aires
La gran final del segmento Sub 14 tuvo a los dos mejores elencos en la pelea. Pero, claro está, este elenco bonaerense, que está compuesto por jóvenes de la cantera de un conjunto salonero de la localidad de Avellaneda, mostró una enorme solidez y un enorme andamiaje colectivo, que lo hizo resaltar por encima del resto.
Las oriundas de Provincia de Buenos Aires venían de un triunfo ante Río Negro por 2-0, pero en el resto de los compromisos fue goleada: 4-1 a San Luis, 6-1 a Chaco y 7-1 a Entre Ríos, una demostración más de su contundencia y andar en cancha.
Las bonaerenses dominaron el juego a lo largo de la totalidad de la final, y pese a los intentos del integrantes del plantel fueguino, siempre se encontraron superiores en el campo, por su despliegue, movilidad y por el toqueteo del balón al ras del piso, que garantizaba no solo la asociación criteriosa de las jugadoras sino siempre la búsqueda de la compañera en soledad dentro de la cancha.
Tierra del Fuego se defendió y aguantó el partido mientras pudo. Con un tiro libre en la primera etapa y un remate que se fue desviado por escasos centímetros, en el comienzo mismo del segundo tiempo, se pudo haber conseguido la paridad. Sin embargo, se dio la lógica y Buenos Aires fue el merecido campeón.
No hay que restarle mérito a estas chicas de Ushuaia que en su primera experiencia nacional dejaron la vara muy alta, habiendo accedido, nada más y nada menos, que a la final de los Juegos Nacionales Evita y lograron el objetivo de ser las subcampeonas en la competencia que reúne a los diversos representantes de todas las provincias del suelo argentino.
