BUENOS AIRES (NA).– Con mucha efectividad y una gran labor de Marcos Acuña, Racing venció cómodamente 3 a 0 a Vélez en Liniers, por la cuarta fecha del torneo de Primera División.
Los goles del equipo visitante fueron convertidos por Acuña, a los 13 y 27 minutos del primer tiempo, y por Lisandro López, a los 39 de la misma etapa.
Racing tuvo que transpirar muy poco para llevarse un partido en el cual nunca sufrió.
En la primera etapa, el equipo se movió al compás de Acuña, que lastimó siempre por izquierda pero que también supo cambiar de banda y ser punzante.
Además, Licha López fue una especie de falso nueve, ya que se tiró atrás para asociarse con el ex Ferro.
De hecho, el primer gol llegó después de una muy buena asistencia del capitán, que supo aguantarla unos segundos y luego descargar para que Acuña definiera cruzado.
Racing continuó con su dominio aún sin brillar, ya que con un juego directo de tres o cuatro pases le alcanzó para colocar en posición de gol a un futbolista.
Sin ir más lejos, un cambio de frente encontró a Acuña por derecha, éste apiló dos rivales, pateó al arco y, después que se lo bloqueara un defensor, definió al fondo de la red.
Y en la tercera llegada nítida, la Academia volvió a convertir: Acuña metió un pase entre línea y López se la tiró por encima a Aguerre para luego empujarla de cabeza.
Consciente del pésimo rendimiento, Christian Bassedas metió doble cambio ya que quitó dos mediocampistas (Héctor Canteros y Leandro Somoza) y puso un delantero y otro volante (Hernán Barcos y Leandro Desábato).
Parecía que el Fortín podía reaccionar, pero con el paso de los minutos, se confirmó que ese inicio fue una ilusión óptica.
Racing, incluso, hasta pudo haber aumentado el marcador cuando un tiro libre de Bou se estrelló en el travesaño.
Renunció Bassedas
El entrenador de Vélez, Christian Bassedas, presentó su renuncia anoche luego del partido.
Bassedas decidió posponer la conferencia de prensa que debía brindar y anunció que la dará mañana, cuando el equipo vuelva a entrenarse en la Villa Olímpica.
La barrabrava de Vélez quiso ingresar al vestuario, pero se encontraron con efectivos de la Policía Federal que lo impidieron.
Incluso, la barrabrava logró entrar al hall, pero fue frenada. En ese sentido, se vivieron momentos de tensión y los efectivos tuvieron que utilizar gases lacrimógenos para dispersar a los violentos.
