La profecía se cumplió: La serie de Netflix El ocaso de los dioses deja a los fans al borde del abismo y sin continuación a la vista
La cosa no pintaba tan oscura para la nueva serie animada de Zack Snyder, pero parece que la profecía era real. El ocaso de los dioses llega con un jarro de agua fría para quienes esperaban que esta historia se expandiera durante años. ¿Te imaginas quedarte en el borde de un acantilado… y que te digan que no habrá siguiente escena? Pues algo así ha pasado aquí, vaya sorpresa.
El arranque de la noticia no es precisamente el típico cuento épico que nos prometía su primera temporada, y te lo digo desde ya para que no te pille desprevenido. ¿No crees que esto tenía toda la pinta de continuar? Porque vaya final se marcaron.
El ocaso de los dioses cerró su primera temporada con un cliffhanger de esos que te dejan pensando durante horas. Loki, el dios de los trucos por excelencia, resultaba ser el verdadero cerebro detrás de todo lo que había empujado a Sigrid a su sangrienta aventura. Y como si eso no fuera suficiente, la muerte de Baldr soltaba el primer trueno de Ragnarök. Sonaba a que la historia acababa de calentarse… y de repente, llega Netflix y baja el interruptor.
El ocaso de los dioses cae por decisiones internas
Según un nuevo informe, la plataforma ha decidido no producir más episodios. Ni uno más. No porque la serie fuera mala o faltara material, de hecho, El ocaso de los dioses tiene un mundo enorme y muy rico para expandirse, sino simplemente porque las cifras de audiencia no acompañaron. Sí, el villano esta vez no es Loki ni Thor, sino los números. ¿Qué opinas? Da un poco de rabia que pase esto después de tanto bombo.

La noticia viene de What’s On Netflix, que asegura que la cancelación se debe únicamente al rendimiento global de la serie. Nada personal, nada creativo, solo datos. Netflix esperaba algo completamente distinto para este proyecto animado de Snyder, pero el interés no fue tan grande como se proyectaba en un principio.
Y por lo visto, esto no es un caso aislado. Otros proyectos del director dentro de la plataforma, como futuras entregas del universo Army of the Dead o cualquier avance en el mundo de Rebel Moon, también habrían sido aparcados. De hecho, incluso su thriller de acción ambientado en Los Ángeles habría pasado a la nevera. Parece que El ocaso de los dioses no es el único que ha sufrido este frío invernal.
Una colaboración potente que se queda sin camino
Volvamos al tema que nos ocupa. La serie de ocho episodios era una colaboración ambiciosa entre Stone Quarry Animation, el estudio de Snyder, y Xilam Animation, responsables de un montón de proyectos europeos. Jay Oliva ejerció como showrunner, vamos, quien llevaba el timón, mientras que Eric Carrasco estuvo al frente de la sala de guionistas. Sobre el papel, todo esto pintaba a una producción sólida, con ideas grandes y ganas de expandirse.
De hecho, tanto Snyder como Oliva habían confirmado anteriormente que tenían un plan enorme para una hipotética segunda temporada. Según ellos, había un gran mapa narrativo preparado, un camino lleno de sorpresas, caídas, héroes, tragedias y giros inesperados para seguir ampliando El ocaso de los dioses. Incluso llegaron a decir que lo tenían todo pensado, solo necesitaban comprobar si había hambre del público para continuar. Qué ironía, ¿eh?

Y claro, leyendo estas declaraciones ahora, uno no puede evitar sentir un pellizquito. La intención de continuar estaba ahí, la ilusión también, pero Netflix decidió que no. Otra historia épica que se apaga antes de tiempo. ¿No te fastidia cuando pasa eso?
Un reparto de voces de lujo perdido entre los dioses
Y si hablamos de lo que hacía especial El ocaso de los dioses, no podemos dejar de lado su reparto vocal. Netflix reunió a un elenco de esos que te sorprenden cuando escuchas los créditos. Para empezar, Sylvia Hoeks ponía voz a Sigrid, la guerrera de hierro protagonista. Y vaya intensidad tiene esta actriz desde Blade Runner 2049. Luego teníamos a Stuart Martin como Leif, ese rey humano que pasa de rescatarse a sí mismo a embarcarse en una misión brutal de venganza.
Pilou Asbæk era Thor. Sí, el mismo actor que ya nos acostumbró a papeles intensos en Juego de Tronos. John Noble daba vida a Odín (como si no lo supiéramos ya con esa voz tan inconfundible). Paterson Joseph se encargaba de Loki, y aquí es donde uno empieza a unir piezas y piensa: “Claro, con esta voz, ¿cómo no iba a ser él el titiritero en la sombra?”
A esto se sumaban actores como Rahul Kohli, Jamie Clayton, Kristopher Hivju, Peter Stormare, Jamie Chung, Lauren Cohan o Corey Stoll. Una alineación de lujo, casi digna del propio Valhalla. Todas estas voces daban vida a un mundo mitológico oscuro, violento y lleno de emoción, justo el tipo de atmósfera que Snyder suele construir.
Un mundo épico que se queda sin destino
Si no viste la serie, te cuento sin destripar demasiado: El ocaso de los dioses nos llevaba a un mundo mítico repleto de batallas salvajes, relaciones intensas, traiciones, violencia divina y decisiones cargadas de peso emocional. La historia seguía a Leif, un rey mortal que es salvado en plena batalla por Sigrid, una guerrera tan feroz como libre. Los dos conectan enseguida, y en su noche de bodas sufren una masacre que los lanza a una travesía de venganza contra fuerzas que incluso ellos desconocen por completo.
Thor, como antagonista abrasador. Los dioses enfadados. Los demonios que se interponen. Las tierras imposibles de recorrer… Es ese tipo de serie que, si te gusta la mitología mezclada con acción adulta, te atrapa rápido. Y sí, daba para mucho más, no te voy a engañar.
¿Y ahora qué ocurre con El ocaso de los dioses?
Pues la situación es sencilla y un poco amarga: por ahora, nada. No habrá temporada 2 en Netflix. Y aunque siempre existe la posibilidad de que otro estudio o plataforma quiera recoger el testigo, no hay ningún indicio real de que vaya a pasar pronto. A veces estas historias se quedan congeladas durante años y, cuando vuelven, ya no son lo mismo. Y otras veces… simplemente desaparecen.
Pero oye, quién sabe. Si algo nos ha enseñado la mitología es que los dioses nunca caen del todo. Y que un buen regreso es posible incluso después del peor de los inviernos. Así que si El ocaso de los dioses tiene que volver algún día, seguro que lo hará dando un golpe en la mesa.
Por ahora, nos quedamos con una historia incompleta, sí, pero también con una temporada llena de ideas potentes, personajes interesantes y un universo que parecía listo para estallar.
Y si te has quedado con ganas de más, ya sabes: comenta, cuéntame qué te pareció la serie y si crees que merece una segunda vida. Cierro esta noticia con un guiño: quizá los dioses no respondan… pero aquí seguimos nosotros. ¿No crees?