Hoy, Día Mundial contra la Trata

La línea 145 recibió casi 1800 denuncias el último año. Un informe anual arrojó que en 2019 casi la mitad de los llamados fueron por situaciones de explotación sexual, cuyas víctimas mayormente eran mujeres y que el sector rural concentró casi un tercio de las delaciones por explotación laboral.

La Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (PROTEX) brindó un informe de casos de 2019.

USHUAIA.- La línea gratuita 145 de denuncia para casos de trata de personas, que coadministra PROTEX con el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, recibió en 2019 casi 1800 denuncias, un número que se mantiene estable con relación al año anterior.
Más de la mitad de las denuncias fueron anónimas, y muchas se vinculan a hechos de desaparición de personas. Si bien la denuncia anónima es una herramienta importante para la persecución penal, dado el alto porcentaje que representan, desde la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (PROTEX) advirtieron que “es importante que quien denuncia anónimamente en rol de víctima sea informada -en esa primera oportunidad- de la totalidad de derechos que le asisten, entre ellos por ejemplo, la posibilidad cierta de obtener una reparación económica por el daño ocasionado, independientemente de la solvencia económica de su explotador. Mayor y mejor información acerca de sus derechos puede resultar un incentivo para garantizar un acceso más pleno a justicia, con una víctima identificada y con mayores niveles de participación y control sobre su caso”.
La compilación anual que PROTEX realiza con los números obtenidos permite, por un lado, fortalecer la política criminal del Ministerio Público Fiscal de la Nación y mejorar la respuesta institucional con el conocimiento de la mecánica del delito y los casos que ingresan; y por otro, dar cuenta de la tarea interinstitucional que se articula desde la procuraduría especializada junto al Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, las dependencias judiciales que desarrollan las investigaciones, las organizaciones no gubernamentales que se ocupan de la temática y la ciudadanía, fundamentalmente, que sigue confiando en este canal de denuncia.

Los números de 2019
Durante el año 2019 se recibieron 1796 denuncias, de las cuales 1105 fueron remitidas para intervención de PROTEX. De ellas, 936 fueron enviadas a las autoridades judiciales competentes de manera inmediata.    De las denuncias recibidas, 862 se relacionan con la trata con fines de explotación sexual, mientras que la cantidad de denuncias relacionadas con casos de explotación laboral es mucho más baja: 256. En porcentajes, casi 48% de las denuncias fue por trata sexual y delitos conexos y sólo el 14,2% por trata laboral.
Esta diferencia en los números fue analizada desde la PROTEX: en los casos de las denuncias realizadas por las propias víctimas, se necesita, primero, del reconocimiento    de esa persona de que su situación es compatible con formas modernas o análogas de esclavitud, como el trabajo forzado o la servidumbre. Segundo, es necesario que esta herramienta de denuncia anónima y gratuita se conozca; y tercero, la posibilidad cierta y real de disponer de un teléfono y algún espacio de privacidad/ seguridad para realizar el llamado. “Es posible que exista un acceso diferencial a la posibilidad de disponer de una línea telefónica por parte de víctimas de trata sexual, por sobre las de trata laboral, si se tiene en cuenta que la dinámica de ésta última modalidad se aprovecha de lugares de explotación cerrados, sin acceso al público, o lugares descampados y muy alejados de los centros urbanos, y, casi exclusivamente, de víctimas migrantes con estructural situación de pobreza y escaso acceso y conocimiento acerca de sus derechos (talleres ilegales, trabajo agrario de extrema precariedad laboral, entre los principales mercados sensibles a estas prácticas)”, precisaron desde la Procuraduría.
Al detallar sobre los ámbitos de explotación laborales, el informe da cuenta de que la mayor cantidad de las denuncias se vincula a espacios rurales (32%), siguiéndole aquellos casos relacionados con la existencia de talleres textiles (25,3%), y en tercer lugar establecimientos comerciales (16%). Las otras modalidades denunciadas se relacionan con el trabajo en casas particulares (12,5%), a la actividad de construcción (5,9 %), mendicidad (5,4%) y finalmente aquellas vinculadas con el rubro de la industria (2,7%).
El informe da cuenta de que la mayor cantidad de denuncias por explotación laboral se vinculó a espacios rurales

Personas desaparecidas
A pesar de no ser el ámbito específico, la línea 145 sigue siendo un mecanismo para canalizar denuncias por desaparición de personas: algunas veces alegando falta de respuesta de autoridades policiales y en otras, como refuerzo a presentaciones judiciales previas. Solo en algunos casos las personas manifiestan que su llamado es la primera y única denuncia por desaparición. Durante el año 2019, se recibieron 219 denuncias por búsqueda de personas.
De ese caudal de denuncias, 144 no tenían indicadores de la posible comisión del delito de trata de personas, mientras que 75 tenían algún indicador de que la persona cuyo paradero se desconocía podría haber sido víctima del delito de trata o bien de algún otro hecho delictivo.

Mujeres y mujeres trans
El caudal de llamados recibido muestra, como en años anteriores, que los hechos que se denuncian afectan principalmente a mujeres y a la explotación de su sexualidad.
En este sentido, desde PROTEX recordaron los compromisos internacionales adoptados por el Estado argentino, que marcan que se debe prevenir la trata de personas, prestando específica atención a las mujeres, y proteger los derechos humanos de este colectivo. “La mirada particular que requiere este delito se corresponde con la desigualdad histórica-estructural que genera un sistema que perpetúa valores patriarcales. Dicha disparidad es funcional a la explotación y opresión de las mujeres frente a los varones”, sostuvieron.
En esta línea, desde la Procuraduría que conducen Alejandra Mángano y Marcelo Colombo indicaron que “la trata de personas, en especial con fines de explotación sexual, es un delito con un sesgo de género que señala la existencia de circunstancias especiales de vulnerabilidad para las mujeres y niñas que las llevan a ser víctimas”.
El registro de denuncias de la línea correspondiente al año 2019 arroja que, de las 608 víctimas totales referidas en ellas, 462 son mujeres, 84 varones, sobre 80 no surge el género y dos personas son transgénero. Que la modalidad de trata más denunciada fue la sexual, sumado a que el mayor número de víctimas hayan sido mujeres y el mayor número de victimarios varones, da cuenta del contexto específico de vulneración que afecta a este grupo.
Para PROTEX, el bajo número de víctimas transgénero es producto de la “invisibilización de las violaciones a sus derechos” y las circunstancias en que se producen los delitos.