Lo hechos ocurrieron entre 2011 y 2014, tras la denuncia el caso fue cerrado por el juez interino Andrés Leonelli, pero la Sala Penal de la Cámara de Apelaciones revocó esa sentencia y resolvió el procesamiento del imputado, identificado con las iniciales JMD. Ahora el caso llega a juicio
RIO GRANDE.- El proceso oral a puertas cerradas se desarrollará en los tribunales a partir del 1° de agosto por el Tribunal de Juicio Oral. Allí juzgarán a JMD de 41 años quien en 2015 fue denunciado por su expareja en relación al presunto abuso sexual de la hija que tenían en común, la cual se negaba a cumplir con el régimen de visitas que tenía con su padre tras la separación.
En ese momento la menor tenía 16 años y finalmente reconoció que había sido víctima de abusos sexuales en un número indeterminado de veces desde que era pequeña.
La acusación precisó la comisión de los hechos entre los años 2011 y 2014 en que se habrían producido los abusos, pero el imputado fue sobreseído el mismo año de la denuncia por el entonces juez Andrés Leonelli, a cargo en ese momento del Juzgado de Instrucción 2.
Nuevas medidas
El sobreseimiento fue apelado y la Sala Penal de la Cámara de Apelaciones lo revocó, dictando una falta de mérito, pero ordenando diversas medidas de prueba que consideraba incompletas.
Con el paso del tiempo el nuevo titular del Juzgado de Instrucción, el juez Raúl Sahade, completó esos pasos procesales y finalmente elevó la causa a juicio oral, sin procesamiento, por lo que el imputado llega en libertad.
El tribunal dispuso el inicio del juicio a partir del 1° de agosto con 14 testigos que deberán declarar, actuando el Dr. Jorge López Oribe en la fiscalía y el abogado Alejandro de la Riva en representación del imputado.