¡San Juan! ¡San Juan! Dame milcao yo te daré pan

La noche de San Juan se trata de una mezcla de celebraciones indígenas influenciadas por las costumbres cristiano-españolas, dando lugar a gran cantidad de ritos y tradiciones, y con el objetivo de motivar, a través de recuerdos, vivencias de la infancia y el entorno de sus afectos, el Hogar San Vicente de Paul se prepara para encender la fogata.

RIO GRANDE.- En el marco del proyecto labor-terapia, cuya consigna es rescatar historias y recuerdos y han denominado “Libro de la memoria”, se está trabajando en la celebración de la noche de San Juan, fiesta en la que se recuerda el nacimiento de Juan Bautista, próximo al solsticio de invierno para el hemisferio Sur y asimismo coincide con el Wetripantu (año nuevo mapuche). Es un evento cristiano-pagano de origen ancestral.

El gran protagonista de la Noche de San Juan es el fuego, cuyo fin no sólo es rendir tributo al sol, sino también purificar los pecados del hombre. Antiguamente se realizaban fogatas reducidas en las que se calentaban papas o batatas, que luego eran ofrecidas a los asistentes para así asegurarles alimento suficiente durante todo el año. También se arrojaban a las llamas ropas viejas, papeles, y cualquier objeto que representara un mal recuerdo, y así se exorcizaban los malos sucesos de los doce meses anteriores.

Muchas son las creencias que se relacionan con esta mágica noche, e incontables las tradiciones con las que se la celebra, entre las que podemos destacar las siguientes:

Según se cree, en el exacto momento en que el sol ilumina el amanecer del día 24, las aguas de fuentes y arroyos están dotadas de poderes especiales para curar y brindar protección a la gente.

Quien se baña en el rocío que cae esa noche quedará protegido durante todo el año.

Si se quema un papel donde se haya escrito aquello que se quiera olvidar, se puede lograr bienestar por todo el año.

La Iglesia católica celebra su fiesta principal el 24 de junio (seis meses antes de Navidad, ya que el evangelio cuenta que su madre Ana estaba de seis meses cuando el ángel anunció a su prima María que sería madre del Mesías).

 

 

Participación y tareas

Este proyecto que tiene como objetivo rescatar las vivencias de cada uno de los residentes del Hogar estimulados a contar sus vivencias y generar a partir de esos relatos eventos culturales desde sus recuerdos y ensamblar en un espacio común las ricas historias que los adultos mayores nos puedan legar.

Es por ello que los residentes pusieron manos a la obra y juntaron en las inmediaciones del hogar las hojas que nos regala el otoño para realizar el muñeco que será quemado en la hoguera, diseñaron y realizaron el muñeco con la vestimenta para la ocasión.

La fogata quemará todo lo viejo y se dará inicio a un nuevo ciclo de la vida, y cabe destacar que tendremos todos los vecinos de la ciudad la oportunidad de acompañar a los abuelos, aportar bailes y canciones y sobre todo compartir un evento generado por ellos.

El hogar de Ancianos San Vicente de Paúl, ubicado en Ameghino 666 de Río Grande, abrió sus puertas el 1º de noviembre de 1974 y lleva el nombre de “Purísima Concepción”. Al inaugurarse, estaba a cargo de la Hermana Superiora de la capilla Virgen Niña. La Institución a cargo de Elba Nimer, y respaldada por una Comisión Directiva, sigue como en sus inicios siendo un ejemplo de solidaridad, trabajo y de continuidad de un camino tan interminable como el amor hacia el prójimo.

 

El fuego es uno de los tres símbolos en que se basan los rituales ancestrales de esta noche. Es el elemento purificador que nos libera.