Los dirigentes de ultraderecha se reunieron en un lujoso hotel de Camboriú, previa a su participación en la CPAC, donde vieron la eliminación de Brasil de la Copa América, por penales ante Uruguay. ¿El encuentro resultó mufa?
Más allá del traspié futbolístico, tanto Milei como Bolsonaro no dudaron en mostrar el afecto personal que se tienen y su sintonía política, algo que complica aún más la relación con la administración de Lula da Silva.