Un menor denunció un secuestro pero en realidad escapaba del esposo de su amante

El menor de 17 años apareció en la puerta de una vivienda pidiendo ser auxiliado porque unos secuestradores le quitaron la ropa y lo dejaron abandonado en la vía pública. Sin embargo, después se pudo constatar que en realidad escapaba del marido de su amante, cuando la Policía debió intervenir ante una denuncia por una acalorada discusión de una pareja.
RIO GRANDE.- La situación se produjo el sábado por la mañana cuando una vecina de calle Finocchio al 1800, denunció que un joven en paños menores apareció en la puerta de su casa.

El joven le solicitó pantalones a la denunciante, identificada como Vanesa Ramírez, quien totalmente ajena a la situación decidió ayudarle y le facilitó dicha prenda de vestir.

El joven mientras se vestía le señaló a la mujer que había sido secuestrado y abandonado por sus captores en paños menores, tras lo cual se retiró del lugar.

Paralelamente efectivos policiales de la comisaría Segunda recibieron un llamado de un domicilio de calle Finocchio 1755, donde se producía un problema de pareja.

Allí la intervención policial encontró a un hombre de 24 años discutiendo con su pareja de 20, asegurando al personal policial que había encontrado a la misma en compañía de un joven.

El hombre aseguró que el amante furtivo apenas lo vio, escapó corriendo desnudo, dejando en el lugar sus prendas de vestir e incluso su celular.
Menor de edad

Personal policial dio intervención a la comisaría del Menor y la Familia para asistir a la pareja en conflicto, mientras que procedió a resguardar las prendas de vestir y el celular, propiedad del fugitivo.

Con estos elementos el personal policial finalmente pudo identificar al amante que llegó a escapar una cuadra corriendo en paños menores, el cual fue finalmente localizado en un domicilio de calle Forgacs a pocas cuadras de la escena del acto de infidelidad.

Allí se constató que se trataba de un adolescente de 17 años, al que le fueron devueltos los bienes olvidados, descartándose allí la denuncia inicial de un posible “secuestro” que terminó siendo un acto de infidelidad que quedó al descubierto.