Profundo pesar dejó en la comunidad riograndense la partida de uno de los peluqueros icónicos en su oficio y con más de 50 años de labor en Río Grande. Cayetano “Changuito” Salazar se fue a los 79 años.
RIO GRANDE.- Cayetano “Changuito” Salazar nació en Tucumán en 1941 y ya en 1962 adoptó a la ciudad de Río Grande como su lugar para vivir.
Siempre con el mismo objetivo, Cayetano trabajó siempre como peluquero.
En esos años no había tanta actividad y el peluquero era una de esas personas que tenían su clientela a la que se la visitaba.
Con el correr de los años esa actividad se fue afianzando y abrió el primer local propio. Que, sin pensarlo, se convirtió en la peluquería más antigua de Río Grande. Cortó el pelo y compartió historias por más de 50 años, convirtiéndose en referencia obligada para quienes necesitaban un corte, pero particularmente para los niños por su trato especial y amable.
Lamentablemente para la familia y para los riograndenses, el coronavirus se lo llevó. Ese vacío no podrá llenarse y El Changuito pasó a la inmortalidad en una ciudad que ya lo extraña.
En un reportaje que el periodista Miguel Vázquez tuvo oportunidad de realizarle y que fuera publicado en la edición del 27 de julio del año 2000 de El Sureño, titulado “Por una cabeza”, decía que “Cayetano Nicolás Salazar es peluquero, uno de los más antiguos que todavía sigue en actividad. Es más conocido por su apodo de ‘Changuito’. Con una gran vitalidad, pone toda su buena onda para que el cliente sienta todavía la cordialidad pueblerina. Su peluquería es un lugar de encuentro, de saber lo cotidiano y en más de una ocasión sirve de confesionario, porque algunos ponen a disposición del Chango, no sólo la estética superflua de su pelambre, sino también lo profundo e intrincado de su pensamiento humano”.
El “Changuito” había nacido el 7 de agosto de 1941 en Aguilares, Departamento Río Chico, al sur de la provincia de Tucumán y era hincha fanático de Racing Club.