USHUAIA.- Desde hace ya una semana, la Unión de Rugby de Tierra del Fuego implementó las nuevas medidas reglamentarias dispuestas en la formación fija del scrum, que pretenden minimizar las lesiones cervicales a la hora de ejecutar dicha formación fija en cada encuentro.
Jerónimo Bello, del SIC, fue la última víctima producto del derrumbe del scrum, días atrás, que motivó a la UAR a tomar serias medidas al respecto con el fin de evitar futuras acciones similares dentro de un campo de juego, por lo que se creó una Comisión de Seguridad en el Juego, y se profundizaron la normas de preservación de los jugadores a la hora de poder realizar la formación.
El referente del referato fueguino, Juan Bettiga, brindó detalles de las nuevas indicaciones que se han adaptado desde la UAR, y que unificaron, en definitiva, los criterios de arbitrajes para todo el rugby argentino.
“Este un criterio de emergencia, ante todo, y de resolución inmediata para preservar la integridad física de los primeras líneas, que son los que más expuestos están a la hora de realizar el scrum”, mencionó Bettiga acerca de estas determinaciones que se adoptaron recientemente en la UAR.
“Desde los juegos desarrollados la semana pasada, porque fuimos notificados de la medida y sanción de la misma”, apuntó Bettiga con respecto a la ya adaptación de las modificaciones a los certámenes locales de la Unión de Rugby de Tierra del Fuego y añadió que “en el scrum, jugador que no toma el codo arriba es free kick , a la segunda es sancionado con penal, y a la tercera se va con una tarjeta amarilla”. Sin dudas, se toma una “tolerancia cero a este tipo de acciones, que persiguen, fundamentalmente, la seguridad de los jugadores”.
La intención pasa por el extremo de que se forme, se ejecuta y sale rápido la pelota. “Para ello, se toma colaboración con el referee asistente, que ingresa al campo de juego al lado opuesto y si observa algún tipo de infracción que no supo divisar el árbitro levantará su bandera y cobrará la infracción”, profundizó Bettiga con respecto a la colaboración y asistencia del asistente en la acción de la formación fija y “no hay reseteo en la acción”.
Alerta por lesiones
En un corto tiempo, se dieron tres lesiones graves a raíz del derrumbe del scrum, por lo que “se encendió la alerta de la UAR, para intentar modificar esta acción y bajó los nuevos lineamientos por la seguridad de todos, desde las formativas hasta las primeras divisiones”.
Buscando la colaboración de todos los actores, se encuentra además, Franco Pani, como Oficial de Desarrollo, trabajando con los jugadores para concientizar los conceptos vertidos y poder capacitarlos para la correcta ejecución del scrum.
Por su parte, la entidad madre de este deporte en el país decidió crear una Comisión de Seguridad en el Juego, que se pondrá a trabajar para reducir los riesgos en la práctica del rugby y particularmente en esta formación clave del juego.
Se encargarán de tratar aspectos como la preparación y capacitación de jugadores, entrenadores y árbitros. En cuanto al scrum específicamente, se debatirán los aspectos médicos del mismo, así como también su mecánica y la seguridad.