El almirante Alvin Holsey, jefe del Comando Sur de Estados Unidos, sostuvo que “la seguridad regional exige respuestas conjuntas” para enfrentar “amenazas compartidas”.
BUENOS AIRES (con información de NA).- La Argentina se convirtió en el epicentro de la agenda militar hemisférica con la apertura de la Conferencia Sudamericana de Defensa 2025 (Southdec25), organizada por el Comando Sur de Estados Unidos y el Ministerio de Defensa nacional.
El encuentro, que reúne a las máximas autoridades castrenses de la región, estuvo encabezado por Holsey, jefe del Southcom, quien advirtió que “la seguridad regional exige respuestas conjuntas”.
Holsey arribó al país para participar de la conferencia junto al brigadier general Xavier Isaac, jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas argentinas, y el ministro de Defensa Luis Petri, anfitrión del encuentro.
En la inauguración de la Conferencia Sudamericana de Defensa (SOUTHDEC) en Buenos Aires, el jefe del Comando Sur de Estados Unidos, almirante Alvin Holsey, advirtió sobre el peligro de la penetración en la región por parte de China, poniendo énfasis en la protección del Estrecho de Magallanes y el Paso Drake.
El Almirante Holsey señaló en su exposición que, desde que asumió en la organización, buscó priorizar los encuentros para conocer las perspectivas y puntos en común con las fuerzas militares aliadas para “trabajar juntos y superar las amenazas. Hoy nos acompañan muchos líderes de defensa sudamericanos, cuya presencia demuestra el compromiso compartido para defender los valores democráticos”.
Además, destacó especialmente que China incursiona en la región con un modelo que apunta a extraer recursos y preparar el ambiente con infraestructura con potencial doble uso, desde los puertos hasta el espacio.
En este escenario, subrayó que «su presencia e influencia tienen consecuencias de largo alcance en todos los ámbitos, particularmente en el Cono Sur, donde hay líneas de comunicación marítimas vitales, como el Estrecho de Magallanes y el Pasaje de Drake, que sirven como puntos de estrangulamiento estratégicos».
Manifestó luego que «tenemos que poner a América primero. Así que cuando vimos que los carteles criminales operaban en esta región, aterrorizando a nuestros pueblos, desgastando nuestros sistemas financieros y desestabilizando a nuestros gobiernos, tomamos acción. Estos carteles ahora son designados como terroristas, lo mismo que ISIS y Al-Qaeda».
Sostuvo a continuación que cada país del continente no puede trabajar solo porque la seguridad es una responsabilidad compartida. En ese sentido, puso el foco en la necesidad de asegurar fronteras, puertos y espacios aéreos y, sobre todo, en invertir en defensa y en el adiestramiento de las Fuerzas Armadas.
Finalizó enfatizando que «esta es una nueva era para el hemisferio occidental. Estados Unidos está completamente involucrado y va a liderar la protección de nuestros pueblos, pero también cada uno en esta región debe ser fuerte».