El estrés de la segunda mitad del año

Comenzó la segunda mitad del año y se suman a las exigencias cotidianas el balance de lo sucedido en la primera etapa: metas pendientes, los compromisos laborales, y el consecuente agotamiento por las sobreexigencias.

RIO GRANDE.- El ajetreo diario de la vida, sumado a todo lo acontecido en la primera mitad del año pueden hacer el estrés, se decoontrole. En esta nota, algunos consejos para mejorar la rutina y ganarle al estrés.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define al estrés como reacciones fisiológicas que en su conjunto preparan al organismo para la acción. En otras palabras: una alarma que pone al cuerpo en alerta y que puede ser coherente o exagerada en relación con el contexto. Cuando esta respuesta se produce en exceso, se genera una sobrecarga de tensión que repercute negativamente en el organismo e impide su normal funcionamiento, provocando alteraciones de ánimo, falta de concentración, olvidos, y consecuencias fisiológicas.

Muchas veces se considera que el estrés repercute únicamente en lo anímico o psicológico, pero también genera deficiencias en todas las funciones del organismo: el aparato cardiovascular, el digestivo, la respiración, etc; afectando directamente sobre la salud de quien lo padece. Algiunas claves para mantener el equilibrio son:

– Al dormir, respetar las 8 horas de sueño diarias. Fundamental para el organismo. Se sugiere esperar una hora después de la cena para irse a dormir, mejorando así la digestión.

– Hacer actividad física. El ejercicio funciona como vía de escape de los problemas, a la vez que mejora la circulación sanguínea y las tensiones musculares.  Además, mediante ésta, las personas pueden desconectar por un rato de sus problemas y preocupaciones de cada día.

– Tener una alimentación sana y equilibrada. Esto es esencial para mantener en orden el cuerpo y la mente, y así evitar que el estrés afecte al estómago, defensas y el sistema nervioso. Es importante hacer las cuatro comidas.

– Hacer pequeñas pausas: Tomar unos minutos durante la rutina para estirarnos, caminar o tomar aire fresco son suficientes para recuperar las energías que se pierden a lo largo del día. Asimismo, es recomendable la diversión: juntarse con amigos, ir al cine o a un restaurant que nos guste. Es importante dedicar tiempo a nosotros mismos.

La segunda mitad del año, puede ser el momento para equilibrar la rutina.