BUENOS AIRES (NA).- Economistas advirtieron ayer que la cifra de inflación oficial, de 2,4% para marzo, debe ser tomada con “preocupación y cuidado”, y subrayaron que fue “más alta” de lo esperado.
“La inflación de marzo me preocupa mucho. Se veía venir porque hay un aflojamiento monetario del último trimestre del año pasado y eso, en algún momento, iba a tener consecuencias”, sostuvo el exsecretario de Finanzas Guillermo Nielsen.
En declaraciones a radio Belgrano, admitió sentir “temor por las consecuencias políticas que puede tener todo eso”.
Según datos del INDEC, los precios minoristas registraron un alza del 2,4% en marzo, por encima de lo previsto, y el costo de vida acumuló un 6,3% en el primer trimestre del año.
Ese comportamiento de los precios proyecta por encima del 25% el costo de vida para todo el 2017, cuando la meta fijada por el Banco Central es de entre 12% y 17%.
El gobierno porteño, en tanto, señaló que el Indice de Precios al Consumidor de la Ciudad de Buenos Aires (IPCBA) registró en marzo un alza del 2,9%, por encima del nacional, que fue del 2,4%, y acumuló 7,1% en el primer trimestre del año.
Nielsen evaluó que “con este esquema, la economía no va a ayudar al Gobierno en las próximas elecciones. Más plata en la calle en este contexto es un problema”.
El economista señaló, además, que la suba de tasas dispuesta por el Banco Central, se ubica “muy por encima de lo deseable”, ya que el Gobierno, a su criterio, “sigue tirando manteca al techo”.
“La buena economía no se da haciendo todas las cosas a la vez porque hay un riesgo presupuestario muy grande y el Gobierno está pagando un costo desproporcionado. Y eso no le asegura paz política”, enfatizó.
Nielsen estimó que la Casa Rosada no logró una “buena coordinación entre la política monetaria y la política fiscal”.
El economista jefe de la Fundación FIEL, Juan Luis Bour, también se refirió a la inflación y consideró: “La inflación fue más alta de lo que esperábamos hace un tiempo”.
En diálogo con radio Continental, analizó la aceleración del costo de vida y argumentó que “los ajustes tarifarios se meten tarde o temprano en los precios”.
“Hubo ajustes en electricidad, este mes en el gas y el próximo habrá en el agua. Además, los servicios privados que estuvieron frenados durante 12 años, como salud, ahora tienen ajustes mayores que el resto”, puntualizó.
“La otra cuestión es que hay un exceso de pesos en el mercado. Hay una inundación de pesos y eso lleva a una alta inflación”, alertó.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, reconoció ayer que en el Gobierno están “preocupados y atentos” ante la escalada que volvió a mostrar la inflación en febrero y marzo, tras varios meses de desaceleración.
Respaldó, sin embargo, la política monetaria restrictiva que lleva adelante el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, con una reciente nueva suba de tasas de interés de corto plazo, para tratar de despejar versiones sobre internas en el equipo económico.
El funcionario señaló que los números muestran que en el tercer trimestre del año pasado la economía “lentamente se ha puesto en marcha”, con una evolución en el cuarto trimestre de 2016 y en el primero de 2017.
