El motovelero oceanográfico Dr. Bernardo Houssay de la Prefectura Naval Argentina zarpó hacia una nueva campaña de investigación internacional, con la presencia del subprefecto Nacional Naval, prefecto general Alejandro Annichini, quien despidió a la tripulación.
BUENOS AIRES.- En el marco de las acciones de investigación y monitoreo ambiental que lleva adelante la Prefectura Naval Argentina, el motovelero “Dr. Bernardo Houssay” zarpó para dar inicio a una campaña científica de aproximadamente 45 días, con proyectos propios de la Dirección de Protección Ambiental y en colaboración con investigadores de distintos centros de estudio de Argentina y Chile.

En el evento estuvo presente el subprefecto Nacional Naval, prefecto general Alejandro Annichini, quien despidió a la tripulación deseándole éxito en esta travesía.
La primera etapa del viaje se desarrollará en la zona de Mar del Plata donde, junto al Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP), realizará una estación permanente de monitoreo en aguas cercanas a Miramar.
Posteriormente, la embarcación se dirigirá hacia Ushuaia, donde está previsto arribar los primeros días de noviembre para iniciar una campaña binacional junto a investigadores del Centro Austral de Investigaciones Científicas (CADIC-CONICET), de Uruguay y de distintos centros y universidades chilenas (Universidades Austral, Concepción y Magallanes y el Centro de Investigación Dinámica de Ecosistemas Marinos de Altas Latitudes (IDEAL)). Durante quince días los equipos trabajarán en el canal Beagle, realizando estudios sobre microplásticos, sedimentos, carbono y bosques de algas marinas.
Una vez finalizada esta etapa el buque abrirá sus puertas al público en Ushuaia, invitando a la comunidad a conocer su laboratorio y las tareas de investigación científica que se desarrollan a bordo.
El regreso hacia a Buenos Aires incluirá distintos puntos de muestreo en el Golfo San Matías, la Reserva de Biosfera Patagonia Azul y el Rincón, áreas donde la institución mantiene estudios continuos desde hace más de dos años. Estas investigaciones buscan evaluar la presencia y el impacto de microplásticos en el ambiente marino, así como otros parámetros biológicos y físico-químicos del agua, con el objetivo de fortalecer la preservación de los recursos.