UNTDF: Actividad del primer cuatrimestre

La licenciada Patricia Vara, secretaria Académica de la UNTDF, habló acerca del informe publicado por la universidad sobre la actividad del primer cuatrimestre. La funcionaria destacó el trabajo realizado por el equipo de docentes y no docentes que permitió que se dicten más del 90% de las clases.

La Universidad Nacional de Tierra del Fuego confirmó que continuará con la misma metodología durante el segundo cuatrimestre.

RIO GRANDE.- Según un informe publicado en su sitio oficial la Universidad de Tierra del Fuego alcanzó un 94% en el cumplimiento de las clases dictadas. Además, se habilitaron aulas modulares, una biblioteca, un laboratorio y mesas de examen en las que participaron casi 700 estudiantes. El informe completo puede leerse en el sitio web de la UNTDF. En cuanto a cómo fue el proceso para implementar un plan que permitiera a la institución continuar con las actividades en contexto de pandemia.   
“Una de las cosas que hicimos fue no obligar a nadie a trabajar compulsivamente en una situación para la que nuestros docentes no estaban capacitados. Porque una cosa es la educación presencial y otra es la educación a distancia. Hay un uso de tecnologías, formas pedagógicas bien distintas de la presencialidad”, indicó la licenciada Vara.
La secretaria explicó que durante la primera semana se realizó una encuesta de diagnóstico entre docentes y estudiantes en cada instituto. Luego, se generó un marco normativo, a través de la resolución 104/2020, para la creación de modalidades que no existían dentro de la universidad: la modalidad en línea y la modalidad mixta.   
Desde marzo hasta hoy, sin embargo, las proyecciones y cronogramas tuvieron que ir adaptándose a la situación que se daba en la provincia: “Nosotros intentamos ser muy cautelosos. Planificamos poder comenzar las clases sabiendo que iba a suceder siempre que ciertas variables se mantuvieran constantes. Elaboramos un protocolo que se elevó a Nación para que sea evaluado”, contó Vara.

La estadística que publicó la institución en su sitio oficial sobre las actividades del primer semestre.


Mientras se espera, las actividades en la universidad continuaron con modalidad mixta: “El trabajo de todos los no docentes se realizó de manera remota. Se creó el comité de emergencia para asesorar al rector y el comité académico de crisis. Pero una de las cosas que especialmente pidió el rector José Castelucci fue que las decisiones fueran consensuadas y legitimadas por todos los institutos”, detalló la docente.
Y agregó: “Los docentes universitarios no escapan a situaciones que van desde la falta de elementos tecnológicos hasta espacios reducidos o dificultades de conexión a internet: “Sin embargo el apoyo fue masivo. Aunque nos enfrentamos a complejidades que, creo, le pasaron a toda la sociedad”.
La encuesta realizada al principio del aislamiento arrojó que más del 90% de docentes y estudiantes tenía acceso a internet y a dispositivos móviles o computadoras.
Luego del diagnóstico, Vara contó que se creó una red solidaria para los que no tenían acceso a estos elementos; se creó una red solidaria que daba una respuesta específica para cada caso, desde gestionar y mediar en situaciones, hasta aportar económicamente de sus propios bolsillos para colaborar con la compra de mercadería en los momentos en que el aislamiento era más estricto: “Se creó un delivery de apuntes para quienes necesitaban leer en papel. Hubo hasta una intervención en la que se tuvo que pedir al vecino de una estudiante que le prestara su conexión a internet para una persona y la universidad tuvo que mediar en situaciones como esa. O que estudiantes permitieran que compañeros bajen la información en su casa, si alguno vivía cerca pero no tenía internet. La universidad estuvo buscando contener estas situaciones, tanto para estudiantes como para docentes”.

“La universidad es un espacio en que además de profesionales se forman ciudadanos”


Luego del diagnóstico se elaboró un documento a todos los docentes con información acerca de las diferentes herramientas y plataformas, tanto institucionales como alternativas; cómo descargarlas e instalarlas: “Compartimos toda la información para que los docentes que aún no se habían amigado con esos dispositivos supieran cómo se bajaban, cómo se utilizaban, las ventajas y desventajas de cada una. Además, la universidad llevó adelante el programa de Tutorías Tecnológicas para que cada docente que tuviera dudas accediera al soporte técnico necesario en el uso de la tecnología que había elegido. Así que en poco tiempo nuestros docentes pudieron tener clases con los estudiantes en tiempo y espacio de forma sincrónica. Explicar, evacuar dudas, compartir un espacio pedagógico aunque sea mediado por la tecnología”, detalló la secretaria académica.
En cuanto a los desafíos afrontados expuso: “Lo que nos muestra este momento de pandemia es en dónde hay que hacer hincapié. Y las políticas públicas que tienen que estar orientadas a esto; dónde están nuestras deficiencias y qué es lo que Estado tiene que garantizar. El déficit que tiene la provincia históricamente, es el acceso a internet”.
E indicó que para el segundo cuatrimestre se piensa seguir con estas modalidades, sobre todo porque no hay certeza de cuando se volverá a la presencialidad: “Para la presencialidad vamos a esperar la autorización desde Nación. No es una decisión que dependa de la universidad. Estamos en proceso de acondicionar los edificios para lo que será esta nueva normalidad y tenemos los protocolos también presentados ante Nación. Porque sabemos que aún siendo posible, no va a ser como antes”.
La funcionaria no descartó definitivamente el uso de la modalidad no presencial de forma combinada: “Lo que viene no va a ser igual que el segundo cuatrimestre del año pasado. No vamos a dejar de utilizar estas modalidades que llegaron, por ahora, para quedarse. Es un desafío para todos. Para todas las instituciones es realmente un desafío. Cuando todo el mundo pide certidumbre nosotros hemos tenido que gestionar en la incertidumbre. Estar abiertos, atentos a qué tipo de respuesta se puede dar a problemáticas que no existían”, remarcó.
“Realmente es un tiempo de una dificultad enorme pero de un aprendizaje enorme. Y esa es la visión que viene de nosotros, de una universidad que además de ser un lugar donde se dictan carreras y se forman profesionales, es un lugar donde se forman ciudadanos. Y formar ciudadanos con mentalidad de comunidad es muy importante”, concluyó.