Trombosis: Factores de riesgo y claves para prevenir

Es responsable de una de cada cuatro muertes y puede atacar a cualquier edad. Pero es posible reducirla mejorando la identificación de pacientes de alto o moderado riesgo para brindarles el tratamiento adecuado.
RIO GRANDE.- Una de cada cuatro muertes en el mundo tienen un responsable común: la trombosis. Es que los coágulos sanguíneos en las arterias o venas, también llamados trombos, son la razón de las tres principales causas de muerte cardiovascular: infarto de miocardio, accidente cerebrovascular (AVC) y trombosis venosa (TEV).

Los infartos y ataques cerebrovasculares se producen cuando el coágulo obstaculiza el flujo normal de sangre en una arteria del corazón o del cerebro, respectivamente, mientras que la TEV se origina por la oclusión de una vena (generalmente de la pierna), con alto riesgo de desprenderse y de viajar por el torrente sanguíneo hacia el pulmón, generando lo que se denomina embolia pulmonar (EP). En los tres casos, el factor común es la formación del trombo -muchas veces prevenible- y la gravedad de los cuadros que puede desencadenar.

En la Argentina, se estima que unas 60.000 personas sufren un Tromboembolismo Venoso (TEV) por año-. Aproximadamente 48.000 de ellos se manifiestan como Trombosis Venosa Profunda (TVP) y unas 15.000 personas desarrollan un Tromboembolismo Pulmonar (TEP o Embolia Pulmonar). Teniendo en cuenta que la tasa de mortalidad del TEP es de hasta 30%-, esto se traduce en unas 4.300 muertes por año.

El TEV es la primera causa prevenible de mortalidad hospitalaria ya que alrededor del 60% de todos los TEV están asociados a hospitalización. Por ello es posible reducirla mejorando la identificación de pacientes de alto o moderado riesgo para brindarles la profilaxis adecuada.
Síntomas

Los síntomas de la trombosis incluyen: dolor, tensión hinchazón, enrojecimiento y calor en el sitio afectado. Pero el paciente puede no tener síntomas, de hecho la mayoría de las veces es una enfermedad oculta, por lo que resulta clave la prevención, sobre todo, en aquellas personas que tienen riesgo aumentado de padecer TVP como ser:

– Personas de más de 60 años

– Estar en reposo por períodos prolongados: al recuperarse de una cirugía, si sufrió la fractura de un hueso, durante un viaje prolongado, si está enfermo y en cama por mucho tiempo, pasar largas horas sentado frente a una computadora, entre otras situaciones.

– Ser propenso a la formación de coágulos sanguíneos o haber tenido una TVP anterior.

– Tener un catéter venoso central.

– Durante el embarazo y las primeras 6 semanas después del parto.

– Tener obesidad.

– Los pacientes oncológicos.

– Tomar anticonceptivos orales o terapia hormonal.

– Estar internado con reposos por más de 48 horas.
Qué se puede hacer

Los pacientes pueden tomar medidas para reducir el riesgo de un episodio de trombosis. La medida más importante es ser proactivo y averiguar su riesgo de padecer TEV en situaciones de riesgo, como por ejemplo: Internación, viajes mayores a seis horas, uso de anticonceptivos, enfermedades oncológicas, antecedentes familiares de enfermedad tromboembólica.

Además se recomienda respetar las indicaciones (tiempo, dosis, frecuencia) del médico en relación a la ingesta de medicamentos.

Retomar el movimiento tan pronto como sea posible después de una cirugía o una enfermedad, de acuerdo a la recomendación del médico. Moverse reduce las probabilidades de formar coágulos.

Ejercitar los músculos de la pantorrilla durante viajes largos o largas horas de reposo o inactividad física frente a la computadora, o en su trabajo diario habitual.

Si tiene dudas o presenta hinchazón, dolor, entumecimiento, o cambio de color ya sea del miembro superior o inferior consulte a su médico.

Si se va a operar o a internar por cualquier causa consulte a su médico sobre la conveniencia de recibir prevención en el pre o en el postoperatorio.

Si en su familia directa hay antecedentes de trombosis no olvide hacérselo saber a su médico y que este le aconseje cómo protegerse.

Movilizarse e hidratarse son dos herramientas que, también, ayudan a prevenir la trombosis.

La comunidad en general puede hacer una gran diferencia consultando en situaciones potencialmente riesgosas si son candidatos a recibir prevención (profilaxis ) para enfermedad tromboembólica.
Asesora: Dra Alicia B Vilaseca, Médica Hematóloga (MN 70484), Jefe del Servicio de Hematología y Hemostasia de la Clínica San Camilo , Miembro Titular del Grupo Cooperativo Argentino de Hemostasia y Trombosis (CAHT), y de la Sociedad Argentina de Hematología (SAH) , y de la Sociedad Internacional de Hemostasia y Trombosis (ISTH).

Para más información: www.diamundialtrombosis.com.ar

La trombosis es una enfermedad silenciosa que cada año afecta a 60 mil argentinos.
La trombosis es una enfermedad silenciosa que cada año afecta a 60 mil argentinos.