“Esto es algo histórico para los textiles de la provincia”.
RIO GRANDE.- Durante la concentración realizada el domingo 25 de octubre en la Plaza de las Américas, diferentes representantes sindicales dieron a conocer situaciones puntuales en cada fábrica. Todos, sin embargo, coinciden en que es necesaria una conducción sindical que defienda a los trabajadores.
Octavio Torres es trabajador textil desde hace 25 años, y hace seis es delegado sindical de Textil Río Grande. Es uno de los secretarios Internos que le dijo que no, a la actual comisión directiva AOT en Tierra del Fuego. Hoy trabaja junto a delegados de las diferentes plantas textiles de la provincia, para reclamar el cumplimiento de los derechos de los trabajadores.
El domingo durante la concentración, Torres se refirió específicamente a la situación de la fábrica Australtex donde, no hace mucho, hubo denuncias públicas de malos tratos por parte de uno de los gerentes.
“En cada planta, se trabaja más o menos igual, aunque cada fábrica siempre busca acuerdos superadores en la forma de trabajar. Cada trabajador opera aproximadamente tres máquinas a la vez. Son unas 140 bobinas. En Australtex en un momento, les pusieron una máquina más a cada operario. Como para alivianar les pusieron un ayudante, a prueba. Después sacaron el ayudante, pero seguían teniendo cuatro máquinas por persona”, explicó Torres en diálogo con El Sureño.
Con la nueva organización había más gente desocupada para la misma cantidad de máquinas por lo que la empresa, entonces, decidió echar a 40 trabajadores: “Después a través de un acuerdo con el sindicato, volvieron a tomar a esas persona, pero todos trabajaban dos días menos, así que les pagaban el sueldo a los reincorporados con el mismo descuento que les hacían a sus compañeros”, contó el delegado.
“Esa fue una de las tantas estrategias de las que el sindicato fue cómplice -sigui ó diciendo-. Ni hablar del maltrato, de la muerte del compañero y ¿qué pasó? Querían hacer seguir trabajando. Una vez que fui al sindicato, estaban desde Asutraltex con el reclamo por una suspensión de cinco días. Y para esa medida primero tiene que ser una situación grave, además de tener sanciones previas”.
Otra de las situaciones denunciadas es la falta de congresos de delegados: “Nos querían tener separados para que no se sepan las cosas que pasan en las fábricas, que estemos aislados. Cuando pasó lo del fallecimiento del compañero en Australtex, nosotros nos enteramos dos meses después.No es que había un problema en una fábrica y se convocaba a todos los delegados”, recalcó el representante sindical.
En la provincia hay siete fábricas textiles bajo la tutela sindical de AOT. En cada una el sindicato designa un secretario general interno, es quien representa con el voto a todos los trabajadores de esa planta en cada elección sindical: “No es una votación directa como pasa en otros sindicatos.
Ese es el único voto, en total en la provincia son siete, porque no vota el afiliado. Yo soy secretario general interno de mi fábrica. A mí me llamaron para que sea parte de la comisión, pero como no comparto esos ideales dije que no. Pero es lo que hacen, entonces si de los siete tienen 4 votos, ya ganaron. No importa, como en este caso, que nosotros hayamos llegado a juntar cerca de 500 firmas”, remarcó.
Finalmente, Torres volvió a llamar a la unión de todos los textiles de la provincia: “Es algo histórico lo que está pasando con los textiles en la provincia. Es la primera vez que estamos todos juntos, trabajando, de todas las fábricas”, concluyó.