El ministro de Educación, Nicolás Trotta, adelantó que cualquier eventual suspensión vinculada a la presencialidad en las escuelas en un marco de avance de los casos de coronavirus tendría que ser tomada “en la mínima unidad geográfica posible” y afirmó que “las políticas restrictivas deben estar en otros ámbitos para evitar suspender las clases”.
BUENOS AIRES.- “Hemos determinado que cualquier suspensión vinculada a la presencialidad la tenemos que adoptar en la mínima unidad geográfica posible, no tomar a la Argentina ni a las provincias como un todo. Esto también implica una responsabilidad de cada una de las jurisdicciones”, señaló el funcionario en declaraciones formuladas a la radio online FutuRöck.
En este punto, explicó que el Gobierno nacional será “muy concreto” a la hora de aplicar políticas restrictivas en cuanto a la circulación o actividades sociales porque -subrayó- “la escuela es un espacio priorizado”.
Por otra parte, sobre los protocolos que rigen en las escuelas, el ministro destacó: “Los pasos que estamos dando hoy se vinculan a la experiencia y se dan con enorme responsabilidad y cuidado. Cada decisión la tomamos con la evidencia que teníamos en ese momento; en ningún momento especulamos con la salud y, en ese sentido fueron decisiones sanitarias, no educativas”.
“Es importante dejar en claro que todos los pasos que hemos dado se vinculan a un regreso seguro, con la aplicación de los protocolos. Y en las escuelas de todo el territorio lo que ha sucedido es que detectamos casos de contagio, que no necesariamente se han producido en las escuelas. Estamos en una pandemia, pero la escuela es uno de los espacios donde se puede proyectar un regreso seguro, que disminuya a su mínima expresión la posibilidad de contagios”, dijo Trotta.