Las carreras relacionadas a la administración y comercio son las más elegidas en Tierra del Fuego

La mayor parte de los estudiantes fueguinos opta por dos áreas de conocimientos.

La mayor parte de los estudiantes fueguinos opta por dos áreas de conocimientos. Pese a que es variada la oferta académica, las elecciones de los alumnos muchas veces no se relaciona con la demanda laboral.

RÍO GRANDE.- Las disciplinas vinculadas a la administración y comercio son las que mayor presencia tienen en el sistema terciario y universitario. Carreras como contador público, administración de empresas, recursos humanos siguen siendo los campos de formación más elegidos entre los estudiantes fueguinos pese a que en los últimos años se incorporaron nuevas propuestas a través de la UNTDF y los centros terciarios.

Los datos surgen del informe “Áreas de Vacancia”, que presentó la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU), en la órbita del Ministerio de Educación. El documento buscó emparejar la oferta académica con las demandas laborales. Según dijeron durante la presentación, ninguna región está formando de acuerdo a sus necesidades productivas.

Según la publicación de Infobae, a nivel nacional el último registro disponible marca que hay 1.939.419 estudiantes en carreras de pregrado o grado y que el 38% estudia carreras de salud o de administración. La gran mayoría – el 92%- prefiere carreras universitarias en vez de terciarias. De la población total, el 40% pertenece al Gran Buenos Aires. El porcentaje restante se distribuye: 24% en la región Centro, 10% en la Bonaerense, 10% en el Noroeste, 7% en Nuevo Cuyo, 6% en el Noreste y 4% en el Sur.

En su trabajo, la SPU dividió las áreas de conocimiento en 12 áreas de formación. La mitad de ellas no sobresale en ninguna provincia. Otras que se repiten son Educación y Docencia -la de mayor oferta de títulos en todas las jurisdicciones- y Procesos productivos, diseño y construcciones, que se vincula a áreas como arquitectura, electrónica e industrias.

“Hay regiones en los que la oferta académica que hay en el territorio no tiene ningún vínculo con el requerimiento productivo”, planteó Danya Tavela, secretaria de Políticas Universitarias en la presentación a la prensa. En cada región funciona un Consejo Regional de Planificación de la Educación Superior (CPRES) que planifica la oferta universitaria.

“Queremos que los CPRES asuman efectivamente la planificación, que se articulen con universidades públicas y privadas de la región, además de con los ministerios provinciales”, agregó.

El 78% de los estudiantes universitarios va a instituciones públicas. La región del Centro es la que mayor presencia privada tiene (26%). Hay dos áreas de conocimiento, claves para el desarrollo del país, que encuentran muy pocos alumnos. En las carreras tecnológicas y en la producción agropecuaria -la industria alimenticia y la pesca, por ejemplo- está solo el 4% de los jóvenes en cada una.

Hay necesidades nacionales: se necesita duplicar la cantidad de enfermeros y elevar la graduación de ingenieros. Y hay necesidades provinciales: en Santiago del Estero requieren médicos y en Jujuy, por ejemplo, buscan especialistas en turismo y hotelería. La Ciudad de Buenos Aires, por su parte, tiene la presencia más baja en carreras técnicas de pregrado.

“Nuestra graduación en las carreras científicas y tecnológicas, propias del siglo XXI, es muy baja. La totalidad de graduados en industrias, ingenierías e informática nos da apenas 75 cada 100 abogados. En Chile, la relación es inversa: 200 tecnológicos cada 100 abogados”, dijo Alieto Guadagni, director Centro de Estudios de la Educación Argentina y especialista en el sistema universitario.

El ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro, planteó: “Tenemos un país con un litoral marítimo enorme, pero no tenemos ninguna carrera que estudie la producción marítima. No digo que obliguemos a los chicos a estudiar una carrera ni poner cupos, pero sí orientarlos”.

Parte de esa orientación busca lograrse con las becas Progresar que promoverá mayores beneficios económicos para quienes estudien las carreras prioritarias que se estipularon por región. Para Guadagni, también sería una buena idea implementar un “Fondo de Solidaridad Universitaria”, similar al que tienen en Uruguay, y becar a 100 mil estudiantes para que sigan las carreras del futuro.