Tras la ocupación del edificio del Ipauss que realizaron jubilados autoconvocados ayer al mediodía, la presidenta del organismo Ana Villanueva anunció que este viernes se abonarán haberes de pasivos hasta $20.030 y todos los amparos que no fueron pagados dentro de los primeros cinco días hábiles del mes. Aún así un grupo de jubilados decidió mantener la ocupación hasta que se le pague a todos los pasivos. “No nos vamos hasta que cobre el último jubilado”, confirmaron.
USHUAIA.- Jubilados autoconvocados ocuparon ayer en horas del mediodía el edificio del Ipauss en la capital provincial sosteniendo el reclamo para que se terminen de abonar los haberes del sector pasivo. Por la tarde llegó el anuncio de pago hasta 20.030 pesos, previsto para hoy, pero de todos modos resolvieron permanecer en el lugar.
“No nos vamos hasta que cobre el último jubilado”, dijo la jubilada Patricia Blanco luego de que se confirmara el anuncio de la titular del organismo Ana Villanueva. E faltando “alrededor de 48 millones para que terminen de pagar a 1.900 jubilados”.
“Acá nos quedaremos y estamos en la sala de sesiones, en la oficina, el pasillo, en distintos lugares”, dijo sobre la ocupación pacífica. “Hoy (por ayer) llegaron 65 millones, pero para el sistema previsional son 46 y el resto entró en el sistema asistencial”, indicó sobre el giro de fondos del gobierno.
“Eso alcanzó para amparos y un tramo de hasta 20.300, es decir que faltan cobrar sus haberes más de 1.900 jubilados”, subrayó.
Al momento de la ocupación, estaban los directores y la presidenta Ana Villanueva, que llamó a la policía y tenía previsto pedir el desalojo, aunque cambió de postura: “A la presidenta se le comunicó la decisión de permanecer, dijo que iba a dar aviso a la policía y pedir el desalojo. La policía vino, tomó los datos, dijimos que no nos íbamos a retirar del lugar y que esta es una toma pacífica. Hasta que no se deposite al último jubilado no nos vamos a mover”, fue lo que transmitieron a la fuerza policial.
Villanueva “dijo que iba a pedir el desalojo pero cuando vino la policía, consideró que era una toma pacífica y por el momento no van a hacer nada”, agregó.
“Nosotros le dijimos claro a la presidenta que recurran a los legisladores, al gobierno o no se a quién, porque aun con el riesgo de salud no nos vamos a mover del edificio. Si nos vamos con este pago, la agonía va a seguir hasta el mes de abril. Que busquen la manera de solucionarlo”, reclamó.
Ante un posible desalojo, desafió al gobierno a “que llamen a la gendarmería si quieren, pero de acá no me van a sacar”.
Finalmente dijo que ya les hicieron llegar “ropa de cama y seguramente más tarde nos van a traer comida. Vamos a pedir asistencia de ambulancia por cualquier inconveniente, porque somos varios diabéticos y cardíacos que estamos acá adentro. A esta altura de la circunstancia estamos jugados. Nos vienen manoseando desde hace tres años. Somos los abuelos de la nada, porque nunca solucionan nada para nosotros”, concluyó.
