Las sospechas apuntan hacia un sujeto recién llegado de Mendoza, y a un hombre con el cual convive en una casa de la Margen Sur que fue allanada en la jornada de ayer. Las sospechas de la Policía se confirmaron anteayer cuando se identificó a ambos tratando de desbloquear el celular que le robaran a la secretaria del estudio contable, la cual fue víctima del asalto en el que se llevaron 60 mil pesos y su cartera.
RIO GRANDE.- La semana pasada un sujeto ingresó con el rostro semicubierto al estudio contable de Mackinlay y Estrada, del cual se alzó con más de 60 mil pesos y la cartera de la secretaria, a la cual dejó maniatada en el baño.
La Policía investigaba el hecho contando con un identikit realizado por la víctima y las imágenes de cámaras de seguridad privada de las inmediaciones del estudio asaltado, con lo que ya tenía un perfil del asaltante, pero las características fisonómicas no daban con ningún registro en la base de datos de personas identificadas en la provincia.
El golpe de suerte se produjo el martes cuando dos sujetos dejaron en un local comercial un celular Samsung S4 para desbloquearlo, el cual resultó ser el aparato sustraído a la secretaria asaltada, por lo que ya se pudo contar con mayores precisiones para arribar ayer a un allanamiento.
Recién llegado
El procedimiento se realizó en el domicilio de calle Chawr 34 del barrio Arraigo Sur, casa del presunto cómplice del asaltante, un sujeto que reside en la provincia desde hace un año aproximadamente, oriundo de Buenos Aires, quien se estima que habría oficiado de “campana” en el hecho investigado.
Su compañero, cuyos rasgos coinciden con el identikit, llegó hace pocos días a la provincia desde Las Heras en Mendoza, y a pesar de no contar con trabajo registra movimientos de dinero considerables con giros y transacciones hacia la cuyana localidad.
Del procedimiento en la vivienda de estos sujetos surgió finalmente el secuestro de 10 mil pesos, prendas de vestir y calzado similares a los que portaba el asaltante, llevándose esos elementos al juez de turno, el Dr. Andrés Leonelli, quien al cierre de esta edición evaluaba si los dejaba detenidos o solo notificados de derechos y garantías.
