El sospechoso se confesó culpable del crimen de su tía Julia Guerra

Guillermo Díaz Guerra reconoció ante la jueza Cristina Barrionuevo que ahorcó, descuartizó y decapitó a su propia tía, Julia Guerra, durante la mañana del domingo en Ushuaia. “El motivo que adujo él es que tanto su tía como su primo lo agredían, amenazaban y calumniaban; y además que su tía se aprovechaba de su madre, porque le gastaba el dinero”, dijo el fiscal de la causa, Fernando Ballester Bidau.


USHUAIA.- Guillermo Díaz Guerra, el hombre de 36 años que estaba sospechado de asesinar y descuartizar a su propia tía, confesó haber sido el autor material del crimen que por estas horas conmociona a la provincia.
La brutal historia indica que el pasado domingo Julia Mónica Guerra (58) fue hallada muerta y descuartizada en el baño de su casa, ubicada en la ciudad de Ushuaia. Los cortes fueron a la altura de la cintura y también el asesino la decapitó.
Tras el hallazgo, la Policía fueguina montó un operativo para dar con el paradero de Guillermo Díaz Guerra, sobrino de la víctima, y que por esas horas era el principal sospechoso del crimen. Vecinos declararon haberlo visto en la casa de Guerra durante la mañana del domingo. Fueron hasta su domicilio pero no lo encontraron.
A menos de 24 horas del crimen, lograron detenerlo en el Parque Nacional Tierra del Fuego mientras pedía monedas y comida a los turistas. También arrestaron a su madre, la hermana de la víctima, pero fue liberada a las pocas horas. Su declaración había generado dudas en los investigadores.
Luego de una primera indagatoria fallida donde se negó a declarar, finalmente ayer Guillermo Díaz Guerra reconoció ante la jueza Cristina Barrionuevo que ahorcó, descuartizó y decapitó a su propia tía, Julia Guerra, durante la mañana del domingo en Ushuaia.
El fiscal que investiga el asesinato de la contadora Guerra, Fernando Ballester Bidau, confirmó que el detenido Guillermo Díaz Guerra declaró el martes y confesó que fue él quien dio muerte a su propia tía.
“En el día de ayer declaró el imputado, Guillermo Daniel Díaz Guerra, y ante la jueza de instrucción Cristina Barrionuevo reconoció los hechos por los cuales fue acusado”, dijo el Fiscal de la causa.
Y relató que “concretamente confesó que el día domingo alrededor de las 8 de la mañana fue a la casa de su tía (Julia Guerra) y la mató. Una vez en el interior de la vivienda de la víctima, declaró que la ahorcó, luego la llevó al baño, y en ese lugar la cortó con unos cuchillos que estaban en otro lugar de la casa”.
El motivo que adujo el asesino es que “tanto su tía como su primo lo agredían, amenazaban y calumniaban; y además que su tía se aprovechaba de su madre, porque le gastaba el dinero. Y en función de ello es que tomó esta drástica decisión de dar muerte a su tía”, dijo Ballester Bidau.
Además confesó que “él quería también estar tranquilo en el sentido de que no acusaran a su madre, que el único responsable del hecho era él, y su madre no tiene nada que ver con esta muerte”.
“Es un hecho lamentable pero gracias a la labor de la doctora Barrionuevo y sus empleados, este caso pudo resolverse lo más rápido posible”, indicó el Fiscal y adelantó que “todavía queda pendiente la producción de algunas pruebas de ADN, y un informe psiquiátrico del imputado, pero el caso a raíz de esta confesión ya estaría resuelto”, dijo el fiscal.
Por último manifestó que “este tipo de casos no es común, si ha habido homicidios violentos, pero este ha sido bastante impactante, por el modo en que se cometió y por tratarse de parientes”.

El sobrino de la víctima confesó ante la jueza que investiga el hecho.
El sobrino de la víctima confesó ante la jueza que investiga el hecho.