Creador de “Arte para incomodar”

El artista drag Maximiliano Mamani brindó una entrevista exclusiva durante un evento organizado por el Gobierno provincial denominado “Hacia la autoconstrucción de nuestras identidades” y que convocó a numeroso público de todo el país.

Maximiliano Mamani es un artista andino.

USHUAIA.- Desde su casa en Tilcara, provincia de Jujuy, el artista Maximiliano Mamani participó de un conversatorio organizado por la Dirección Provincial de Políticas Socioeducativas y la Secretaría de Pueblos Originarios del Gobierno provincial del que participaron 170 inscriptos a través de la plataforma Zoom y otros tantos por el canal de YouTube.
Maximiliano Mamani es un artista andino creador del movimiento Arte para Incomodar. A través de su personaje Bartolina Xixa, rinde homenaje a la lideresa boliviana Bartolina Sisa, torturada por la inquisición y fallecida en 1782.
A través del arte y la transformación, Maximiliano Mamani invita a repensar el folclore y sus estructuras desde otra perspectiva vinculada con la identidad de género, pero también con las raíces y los estereotipos que lo dominan.
Durante el encuentro, en el que participaron la subsecretaria de Pueblos Originarios Pamela Altamirando y la subsecretaria de Diversidad, Victoria Castro, se abordaron temas como autorreconocimiento, autoconstrucción, desarraigo cultural, educación intercultural, resistencia, racismo y género.
“La resistencia es lo que hace que nos podamos autopercibir. Frente a tantos achaques, a tanta burla por tu color de piel, frente a todas esas violencias que son diarias, es que nace nuestro autorreconocimiento”, explicó Mamani.
“Es lo que nos dice claramente: soy distinto, soy diferente a todo lo que ellos construyen. Soy diferente por marica, por indígena, por pobre, por hablar como jujeño, por no tener esa cultura de ciudad. En este país, que es sumamente racista, el autorreconocernos nace como resistencia. Y el encontrarnos, hace que creemos estrategias para sobrevivir”.
El último trabajo del artista se llama “La Ramita Seca, la colonialidad permanente”, es un cuadro de danza que hace una crítica al uso de la tierra. “Es una denuncia a las mineras y a los transgénicos que vienen a destrozar nuestros suelos. Yo, por tener una formación académica, puedo hablar de esto y entender qué es Monsanto y qué es una multinacional. Pero ¿cómo puedo hacer para que mi madre lo entienda?” “El arte te permite estar pensando quién va a escucharte y posicionarte en su lugar. Así podemos construir en conjunto qué podemos hacer y hacia dónde podemos ir. Por eso bailo”, sostuvo.
Del encuentro participó público de todas las edades, desde los 15 a los 71 años de más de 12 provincias del país, incluso hubo inscriptos de Colombia, Perú, Bolivia, Chile, Brasil, El Salvador, y también de España, Francia e Italia.
Además de hablar sobre el racismo y el rechazo que sufren las personas que no se ajustan a los cánones del colonialismo, el artista se refirió a la expulsión del sistema que sufren las personas por su identidad sexual. “Cuando uno se identifica con otro sexo, hay una especie de abandono de las instituciones, de la familia, del sistema de salud que no sabe conocer tu cuerpo; de la política de Estado a la hora de votar; de la policía que te violenta. Es como que no logran entender por qué estamos en los espacios públicos, transitando, viviendo. Hay una exclusión y el no hacer del Estado, también es una decisión política”.
Para Mamani, esta situación desigual tan arraigada a nuestra sociedad, sólo puede cambiarse participando y militando los cambios que se quieren conseguir. “Todos esos cuerpos que transitan los bordes, tienen que ocupar espacios de poder para que la sociedad sea horizontal y haya espacio para todos”, opinó.