Conmovedor testimonio de un aberrante hecho

Andrea Paola González Paduán, una joven de 27 años, enfrenta un juicio oral y público por el homicidio de un bebé, al que ultimó a horas de haber nacido. “No sentí ningún lazo emocional con el bebé. Lo miré por un largo tiempo y no lo encontré”, dijo al tratar de explicar por qué no lo quería y decidió acabar con la vida de su propio hijo. Hoy las partes darán a conocer sus alegatos. La Fiscalía planteará ante el Tribunal la condena a aplicar.
USHUAIA.- La mujer acusada por haber asesinado a su bebé, dijo ante el Tribunal Oral en lo Criminal, que “yo no quería lastimarlo, yo no quería matarlo. Yo quería darlo en adopción” y puntualizó que “no sentí un lazo familiar con el bebé”. Dijo que lo miró por un rato y “no sentí ningún lazo emocional con el bebé. Lo miré por un largo tiempo y no lo encontré”.

Con este relato conmovedor, donde se conocieron detalles escalofriantes de cómo dio muerte al niño, el jueves, tal como estaba previsto, comenzó el juicio oral y público a Andrea Paola González Paduán, una joven de 27 años que está acusada de haber asesinado a su hijo a pocas horas de haber nacido.

La mujer dio a luz a la criatura el 21 de abril de 2015 a las 7 de la mañana y luego se escapó del hospital hasta su domicilio donde cometió el aberrante hecho que le podría caber la pena de prisión perpetua.

A Andrea Paola González Paduán, de 27 años (nació el 23 de febrero de 1989), se le imputa el delito calificado como homicidio doblemente agravado, en orden al vínculo (se trataba de su propio hijo) y porque de acuerdo a las constancias en la causa había existido ensañamiento y alevosía al momento de dar muerte a la pequeña criatura.
Lectura del acta

Al hablar sobre el día del hecho, la mujer relató que “yo creía que el bebé no se merecía estar conmigo. No quería que viviera lo que yo había vivido y tenía miedo a la reacción de mi papá” (de quien recordó que castigó a su hermana cuando se enteró que había quedado embarazada). Y sostuvo: “Yo no lo quería al bebé”.

“¿Porqué me lo llevé? No sé por qué. Me lo preguntaron un montón de veces; porqué te lo llevaste y no lo dejaste, pero no sé porqué lo hice” dijo ante los jueces del Tribunal.

Sobre cómo fue que mató al bebé, la mujer dijo no recordar nada de lo ocurrido, por lo tanto, se le leyó lo que declaró durante la instrucción de la causa. Lo hizo el Secretario del Tribunal y allí narró que en la plaza del barrio Brown, tapó al niño con su campera y lo comenzó a asfixiar tapando la boca y la nariz, pero seguía vivo.

Como en la plaza pasaba mucha gente, se fue de allí y siguió caminando hasta la escuela 34, donde decidió dejarlo envuelto en su campera en el piso y lo comenzó a pisar, pero el bebé seguía con vida. Así que caminó hasta el puente ubicado en Marcos Zar y 12 de Octubre (a una cuadra de donde vivía), donde volvió a dejar al bebé en el suelo, envuelto en la campera y lo pisó hasta darle muerte.

Cuando llegó a su casa vio que estaba su padre, su hermana y su sobrino. Dejó la campera con el bebé ya muerto en el armario y luego explicó que había estado en la guardia del Hospital y que se había hecho atender en ginecología. Dijo que luego de lavarse, se metió en la cama de sus padres.
Testigos y alegatos

En la jornada de ayer, declararon tres testigos que fueron propuestos por el abogado defensor de la joven, el doctor Raúl Paderne. Se trata de Ramón Héctor González (padre), Isabel Magdalena Paduán (madre), y Gabriela Maricel González Paduán (hermana).

Además, brindaron declaración ante los jueces, Gonzalo Cichero, psicólogo de Andrea Paola González Paduán -también a pedido del abogado defensor-, y luego hizo lo propio la médica psiquiatra del Poder Judicial, María Cristina Martín.

Finalmente, el Tribunal de Juicio dispuso pasar a un cuarto intermedio para hoy, a las 10:00, ocasión en que el abogado defensor y el fiscal Fernando Ballester Bidau darán a conocer sus alegatos.

Cabe indicar que el Tribunal Oral en lo Criminal está presidido por el juez Maximiliano García Arpón, e integrado por los jueces Alejandro Pagano Zavalía y Guillermo González. El fiscal del caso es el doctor Fernando Ballester Bidau.

CUADRO………………….

TESTIMONIO

Estos son algunos de los conceptos vertidos en su declaración, por la acusada:

-Narró que su infancia fue en un ambiente hostil. Indicó que los primeros recuerdos es que vivió en una familia donde no me prestaban mucha atención. Relató que en el jardín de infantes se llevaba bien con todos, pero solamente tenía una sola amiga. Cuando era chica la invitaban a cumpleaños pero ella nunca iba.

-Señaló que vivía en una casa muy pequeña, donde faltaba privacidad y ella podía observar cómo sus padres discutían en forma permanente. Un ambiente bastante hostil, donde había muchas discusiones y peleas. En una oportunidad escuchó a su padre decir que se quería quitar la vida. “Yo tenía mucho miedo que mi papá se quitara la vida”. A los 10 años, ella veía cómo sus padres discutían por problemas económicos y por la inseguridad que tenía su papá respecto a la relación con su mamá.

-Dijo que formaba parte de una familia muy estructurada: El papá era el que trabaja, era el que manda. Mi papá ponía mucho peso en mí como responsabilidades. Nunca sentí la libertad de poder ser una adolescente normal. Me tenían como a la hija que no trae problemas a la casa. Siempre pensaba: “No puedo generar mas problemas donde ya los hay. Me sentía perdida en la vida”.

-Llamó mucho la atención cómo contó con mucho pesar la muerte de una perra, a la que había llevado al veterinario y que cuando le dieron la noticia de que había muerto, pensó que ese era “el último gran fracaso de mi vida”, puntualizando que “cuando mi perra se muere siento que me morí con ella. Se moría lo único que tenía en la vida. Yo me quería ir con ella” y sostuvo: “Todas las noches lloraba. Cuando se murió ella me morí yo. Sentía que no había más nada porqué vivir”.

-Mientras transcurrió el embarazo y tenía ocho meses de gestación, dijo que cada vez que se levantaba quería que el día se terminara rápido. “Yo me despertaba y ya me quería ir a dormir, porque me sentía horrible”. Indicó que sufrió la hinchazón de las piernas, a pesar de lo cual seguía cumpliendo con su responsabilidad de llevar a su sobrina a la escuela, a pesar de lo mal que se sentía físicamente.

-Dijo que desde “marzo hasta 21 de abril, era la nada misma. Era un fantasma. Andrea no existía más, todo lo que pensaba era negro, no había planeamiento de nada”. Dos días antes de tener que ir al hospital, el sábado 18 de abril, acompañó a su mamá al supermercado y allí comenzó a sentir fuertes dolores que eran las primeras contracciones, pero igual las soportó. “El domingo las contracciones eran mas seguidas, me hacía la boluda para que no se dieran cuenta. Cuando llega el lunes, el dolor era terrible” y fue cuando se dirigió al Hospital.

-“Estaba preocupada y tenía miedo. Yo sabía que no podía tener un parto por mí misma. En mi casa no se habían dado cuenta del embarazo”, dijo y recordó que el día que fue al hospital, lo hizo antes que sus padres se levantaran.

-Cuando se presentó al Hospital para internarse, no “podía dar mi nombre porque sino me iba a encontrar mi mamá” y por eso indicó que su nombre era Belén Solari. Luego de dar a luz, dijo que en forma insistente le pedían las enfermeras ponerle un nombre a la criatura, pero ella no quería. “No quería darle un nombre, porque no lo quería”, dijo, señalando que luego de mucha insistencia se le ocurrió ponerle “Felipe. No sé porqué le puse Felipe”, dijo.

-En casi la última parte de su relato, dijo que este “es un caso que conmociona a todo el mundo, pero a la que más conmociona es a mí. Es un dolor que voy a llevar en mi corazón toda mi vida. Cuando veo un bebé ahora, me quiero matar. Pienso, cómo hice esto, pero si yo no soy así. Está totalmente fuera de mi comportamiento habitual en la vida. Me duele en el alma y este trastorno que padezco lo estoy tratando y no lo puedo creer. El resto de mi vida voy a tener que vivir con el peso de que lo maté. No puedo creer lo que hice”.

PERRO
La acusada, Andrea Paola González Paduán, junto a su abogado defensor, Raúl Paderne.
La acusada, Andrea Paola González Paduán.
La acusada, Andrea Paola González Paduán.