El mejor espectáculo de la primera etapa en la 43ra edición del Gran Premio tuvo como protagonistas a Daniel Preto (Honda Civic) y Mariano Chebel (Honda Civic) con una disputa mano a mano que prometía un desenlace apasionante el domingo, pero nos dejaron con las ganas.
RIO GRANDE.- Sin lugar a dudas que la divisional mayor había demostrado el año pasado que tenía dos binomios fueguinos de primer nivel. Hablamos de Mariano Chebel y Daniel Preto, quienes se batieron a duelo desde el comienzo de la 42da edición y en esta oportunidad volvieron a repetirlo, con una batalla que inició con Preto adelante hasta Las Flores y que culminó con el “Tano” primero en el camino, pero con el riograndense por delante en tiempo neto.
“Realmente largamos cuidando mucho el auto porque si bien no habíamos largado con lisas, eran gomas sin clavos. Así se nos hizo complicado andar hasta el Puesto del Ocho y de allí en más secó mucho el piso lo que nos permitió venir lo más rápido posible tratando de darle caza a Dani. No sabíamos si éramos capaces de recortar la diferencia, aunque a fin de cuentas restamos los 3 minutos y le hicimos la diferencia. En estas carreras hay que salir a todo o nada. Nos la jugamos y salió redondo”, comenzó diciendo Mariano en contacto exclusivo.
De confirmarse su victoria en la general, en 2017 estará ante la posibilidad de asegurarse la Copa Challenger: “Seguro que es un condimento extra. Si somos los ganadores no nos va a quedar otra que volver el año que viene para defender lo que hicimos”.
“La persona que tenes al lado es como la pareja que tenés en tu casa. Con Rubén (Peix) nos conocemos mucho haciendo hoja, con comunicación acorde, algo que da sus frutos en la confianza y el ritmo de competencia. Dejame agradecer a mis amigos que nos estuvieron haciendo de auxilio tanto en Las Flores como Onaisín y a todos los sponsors que tenemos el auto ploteado con ellos ya que sin su ayuda no podríamos estar presentes”, enfatizó para concluir.
Por su parte, Daniel Preto se manifestó a través de las redes sociales: “Fue un fin de semana raro y lamentablemente trágico. Salimos a acelerar de entrada tratando, con algunos sustos, de encontrar el mejor ritmo en todo el sector chileno, con un piso muy difícil y traicionero. La idea era intentar hacer alguna diferencia para luego cuidar desde el sector de Arcillosa hasta Río Grande porque los huellones altos y congelados estaban para destruir todo”.
“Así lo hicimos siguiendo nuestra estrategia a raja tabla aunque quizás, un poco por error y otro poco por mala información, cuidamos de más bajando demasiado el ritmo sobre todo desde TF1 hasta Rio Grande que fue donde más cedimos”, prosiguió.
Antes de concluir diciendo: “Terminamos con el auto impecable, muy contentos y motivados, listos para largar la etapa segundos en la ruta lo cual es muy cómodo para seguir con mejor control nuestro desempeño respecto al primero. Pero de golpe, se terminó todo…”.
Una lucha directa que va escribiendo su historia. No hay espacio a interrogante: Preto será el rival más duro para la Challenger de Chebel.
