BUENOS AIRES (NA).- Boca, en un final sufrido y para el infarto, se coronó campeón de la Superliga al imponerse 1 a 0 sobre Gimnasia y Esgrima La Plata, en la Bombonera, arrebatándole el título a River que empató con Atlético Tucumán como visitante.
El experimentado capitán Carlos Tevez, con un bombazo desde la puerta del área, que superó la estirada del arquero Jorge Broun, marcó el tanto del triunfo boquense, a los 27 minutos del segundo tiempo.
Con este resultado Boca trepó al primer lugar, con 48 puntos, uno más que el elenco “millonario”, que quedó finalmente como escolta.
El “Lobo” de Diego Maradona resultó un duro rival para los dirigidos por Miguel Russo, aguantaron con la valla en cero gran parte del partido e incluso en el complemento contaron con chances de gol, paralizando corazones en la Bombonera.
Boca salió con decisión desde el arranque, buscando el gol que le diera tranquilidad a la espera de novedades de Tucumán.
Así fue que a los cuatro minutos Tevez estuvo cerca, tras combinar con Villa, pero Maximiliano Coronel se cruzó justo y desvió el balón.
Jugados 15 minutos, y en medio del dominio local, todo Boca pidió penal por una supuesta infracción de Víctor Ayala sobre Frank Fabra, que el árbitro Facundo Tello no consideró tal.
Cuatro minutos más tarde, la Bombonera explotó y gritó el gol de Javier Toledo, de Atlético Tucumán, casi como un tanto “xeneize”.
En ese momento, el público redobló el aliento, Boca siguió empujando y poco después, a los 23 Broun voló sobre su izquierda para evitar el gol de Eduardo Salvio.
Los minutos pasaban y Boca seguía controlando el trámite, pero no lograba quebrar al “Lobo”. A los 33 hubo una salvada milagrosa por duplicado: Broun tapó un cabezazo de Soldano y en el rebote, tomado por Tevez, con otro testazo, salió a centímetros de un palo.
Cerca del final de la primera parte, a los 42, hubo otra acción polémica, cuando Lucas Licht pareció barrer a Jorman Campuzano en el área de Gimnasia, pero otra vez el árbitro consideró que no hubo falta.
Gol salvador y sufrimiento en el segundo tiempo. En apenas dos minutos del complemento, y cuando a esa altura Boca sabía que River ya había empatado, una mala salida del fondo casi termina en gol de Gimnasia, pero Esteban Andrada ensayó una excelente atajada para desviar el remate de Nicolás Contín.
Los minutos pasaban, Boca no encontraba los caminos y los nervios ya empezaban a jugar su partido. En ese contexto, lo tuvo Maximiliano Cuadra para la visita, tras una buena acción de Matías García, pero no acertó al arco con su derechazo. .
Pasados esos sustos, el ingreso de Ramón Ábila le dio más presencia en ataque a Boca y a los 21 se produjo una acción muy clara, pero Salvio le erró al arco y la tiró afuera, pese a estar en inmejorable posición de remate.
Dos minutos más tarde, Broun puso todo su cuerpo para evitar el gol de “Wanchope” Ábila luego de un rebote de un tiro libre.
A esa altura, el tanto local estaba al caer y llegó finalmente a los 27, con un bombazo de media distancia de Tevez que sorprendió al arquero, haciendo delirar a toda la Bombonera.
El gol del “Apache” trajo el desahogo esperado, pero por momentos Boca perdió el orden y a los 36 se enmudeció el estadio cuando Horacio Tijanovich cabeceó solo, tras un centro de Licht, y la pelota se fue apenas desviada.
Fue lo último que pudo hacer el “Lobo”, ya que el ingreso de Emanuel Reynoso le permitió a Boca tener más tiempo la pelota a la espera del pitazo final en el estadio Alberto J. Armando, que se dio casi en simultáneo con el cierre en Tucumán.
El final conjunto fue el momento del estallido final en la Boca, en medio de la locura de los hinchas, que saborearon un título especial, arrebatado a su clásico rival con el último aliento.
