Analizan el impacto de la actividad humana en las poblaciones de aves

El censo, se realiza cada año, como una iniciativa de la Red Hemisférica de Reservas de Aves Playeras. Desde el 26 al 28 de enero se llevó en la zona costera de la provincia de Tierra del Fuego. Como siempre, la principal preocupación es la merma en las poblaciones de aves. Los resultados definitivos, estarían para marzo. 


 RIO GRANDE.- Se realizó en la provincia un censo de aves playeras, con el fin de determinar la presencia las poblaciones en los diferentes hábitats de la costa marina y el uso que hacen. La iniciativa se desarrolló simultáneamente en Perú, Chile y Argentina y contó con la coordinación técnica y operativa de la la Secretaría de Ambiente, Desarrollo Sostenible y Cambio Climático.

Además de contar, observar y registrar los movimientos de los grupos de aves, otro de los objetivos es fomentar la participación de ciudadanos. En el censo provincial, se involucró a voluntarios con diferentes niveles de experiencia en la observación de aves; y recopilación de datos sobre aves playeras.

Los sectores relevados fueron: Península El Páramo; Bahía San Sebastián; desembocadura Río San Martín; Misión Salesiana; Costa Norte; Laguna de los Patos; Lagunas Chacra XIII; Punta Popper; Ensenada de la Colonia; Cabo San Pablo; Cabo Auricosta, Lago Fuego y desembocadura Ewan Norte.

Una de las observaciones preliminares, según Mauro Pérez Toscani, secretario de Ambiente, Desarrollo Sostenible y Cambio Climático, es la dinámica y los movimientos de la poblaciones de aves: “Estuvimos trabajando también sobre cuál es el impacto que reciben las aves playeras por los perros sueltos en la ciudad. Y se va a analizar si la contaminación de la costa, por vertido de efluentes cloacales, puede estar afectando la disponibilidad de alimentos de las aves migratorias”, explicó. 

“La idea es analizar los impactos que se generan, y si esta es la causa de que  migren las poblaciones hacia zonas más alejadas de la ciudad. Cómo se relacionan la actividades humanas con la escasez de aves playeras, que son cada vez menos, en algunas especies”, agregó. 

En Río Grande, varios integrantes del Club de Observadores de Aves de Río Grande, participaron de la actividad. 

“Es la primera vez que se hace un censo como este en el país. Se hizo en otros  lados, y ahora nos tocaba a nosotros”, dijo en diálogo con El Sureño, Agustín Ramos integrante del COARG.

En Río Grande el censo se focalizó en toda la Bahía San Sebastián; también en  Ensenada de la Colonia en Cabo Peñas, y Cabo Auricosta: “Fueron cinco grupos los que recorrieron estas zonas, en forma simultáneas”, comentó Ramos. 

“Nosotros teníamos una forma específica de cómo hacer los conteos y por dónde. Lo que fue San Sebastián fue un poco complicado, además hubo mucho terreno por cubrir. Pero lo que sí llamó la atención en Punta Páramo y en Cabo Auricosta fue la cantidad de gaviotines sudamericanos. Que en Punta Páramos se contaron cerca de 3 mil, y mil más en Auricosta”, detalló el observador de aves.

 

Los resultados del censo nacional de aves playeras, serán comunicados en marzo.
El grupo de voluntarios e integrantes del área técnica de la Secretaría de Ambiente de la provincia, censaron las aves en las costas fueguinas.