Filosofía para niños: Un proyecto educativo de Río Grande será presentado en Francia

La propuesta educativa fue elegida para ser presentada en julio de 2018 en un Congreso Educativo en Francia.

¿Qué es el amor? ¿Qué es la paz? ¿Qué es el odio? ¿Qué es la amistad? Son temas sobre los que reflexionan los niños de cuarto a sexto grado en la materia filosofía del Colegio del Cono Sur. La propuesta educativa fue elegida para ser presentada en julio de 2018 en un Congreso Educativo en Francia. “Los chicos son unos grandes filósofos, es importante aprender a escucharlos”, afirma la docente María de los Ángeles Paredes.

 

 

RÍO GRANDE.- Los niños, de manera natural, se pasan los primeros años de vida preguntándose por el porqué de las cosas. Es algo innato el querer conocer cómo funciona el mundo que les rodea, la curiosidad por saber hasta el último detalle. Si lo pensamos bien, esta postura no está tan lejos de la de los filósofos, tanto antiguos como contemporáneos, que basan sus reflexiones en la búsqueda de respuestas a determinadas preguntas. Sólo hay que saber aprovecharla.

Bajo esa idea, en el Colegio del Cono Sur hace tres años enseñan la materia filosofía a niños de cuarto a sexto grado. La iniciativa, fue reconocida este año, y la experiencia será presentada en julio del próximo año en un Congreso de Aprendizaje Educativo en Francia.

La docente María de los Ángeles Paredes, en 300 palabras resumió el proyecto que lleva adelante desde 2015, y el proyecto fue elegido entre otros tantos. “Nos enteramos de este Congreso a mediados de agosto, que se estaban buscando docentes e investigadores que tengan propuestas pedagógicas para presentar, quienes deseaban participar con sus propuestas tenían que acceder mediante una plataforma y escribir en 300 palabras la propuesta a presentar”, contó.

¿Qué es el amor? ¿Qué es la paz? ¿Qué es el odio? ¿Qué es la amistad? Son temas sobre los que reflexionan los niños habitualmente en el aula.

“Cuando decido abordar estos valores se debe a que generalmente este tipo de significados ya nos vienen dados cuando estamos en una etapa de crecimiento, cuando hablamos de amor generalmente se empiezan a reír y piensan en quien les gusta. Empezamos a leer cuentos y a reflexionar en que amor hay en todos lados, en la familia, cuando uno decide tener una mascota, no necesariamente es un amor a la pareja”, explicó la maestra.

En este sentido afirma que “es importante conocer qué es el amor y que trae aparejado porque si es bueno y enriquecedor no va a ser algo negativo. Es importante que se aprenda desde pequeño que el amor no lastima, el amor acompaña, y que hace bien. Que es lo contrario al odio y la violencia. La cuestión de la amistad, que es un vínculo que se va construyendo con los años”.

Si bien la filosofía es un campo muy amplio, en primaria la docente se enfoca en el desarrollo de las capacidades de los niños, para trabajar pensamiento crítico, responsabilidad y trabajo con otros.

“Llevamos temas presocráticos en cuarto grado, en quinto la teoría de las cavernas y con sexto grado escribiendo un libro y que ellos mismos puedan plasmar en papel su reflexión”, detalló.

Así fue como el año pasado el colegio tuvo la primera edición de sexto que se egresó. “En la muestra que hicimos se presentó su libro, fue una alegría porque pudieron ver su trabajo plasmado de cuarto a sexto porque se produce un cierre cuando los chicos pueden ver plasmada su reflexión”, asegura.

Enseñar filosofía fue un desafío importante para la docente. “Agradezco que los directivos hayan creído en mi para que yo pueda enseñar, fue una de mis primeras experiencias como docente recién recibida”, afirma.

¿Cómo es trabajar filosofía para niños? “Es aprender a trabajar con simpleza, eso no quiere decir tratar temas escuetos, sino la simpleza de plantear una actividad que pueda complejizarse a lo largo del tiempo. Es aprender a utilizar juegos, textos cortos y simples, y también es importante aprender a escucharlos”, dice.

Además asevera que “a esa edad los niños son unos grandes filósofos, ellos se preguntan todo, es muy raro encontrar un niño que no te cuestione el por qué y es hermoso poder enseñar en un ámbito así porque ya tenés esa predisposición de cuestionador”.

Y sostiene que “lo que uno debe hacer es explotar ese enfoque cuestionador que ellos tienen y ejercitar ese pensamiento crítico que empieza a florecer en ellos”.

María de los Ángeles dice que “los niños tienen esa riqueza en su interior que se hace muy fácil poder enseñarles, porque son chicos muy inteligentes, cada uno tiene una particularidad en preguntarse cosas que uno se queda a veces mirándolos asombrado y eso a uno lo reconforta como docente”.