Al saltar de 9,80 a 14 pesos (alcanzó los 15 en el inicio de la jornada) el valor oficial de la moneda estadounidense redujo la brecha con el blue del 48% a sólo el 3%, por lo que ya no es negocio comprar dólares en el mercado formal para venderlos en el paralelo con el objetivo de obtener una ganancia.
BUENOS AIRES (NA).- Una fuerte incertidumbre y mucho nerviosismo se observó ayer en la city porteña en el primer día de liberación del mercado cambiario, marcada por la extinción del negocio de las cuevas y puestos de empleo amenazados: el de los “arbolitos”.
Como los bancos y la mayoría de las casas de cambio se dedicaron a adaptar sus sistemas informáticos a la nueva normativa y a esperar que el dólar encontrara un equilibrio, los ahorristas que intentaron comprar dólares se vieron confundidos al no poder realizar las operaciones.
Los cajeros bancarios denegaban la venta de divisas, pero sí permitían retirar billetes de cuentas denominadas en dólares: muchos compraron dólares en el último año pero no los retiraron para no perder el 20% que debitaba AFIP durante en el primer año de tenencia.
Al saltar de 9,80 a 14 pesos (alcanzó los 15 en el inicio de la jornada) el valor oficial de la moneda estadounidense redujo la brecha con el blue del 48% a sólo el 3%, por lo que ya no es negocio comprar dólares en el mercado formal para venderlos en el paralelo con el objetivo de obtener una ganancia.
Esa operación conocida como “puré” se extinguió, e incluso al liberarse el mercado oficial se ve amenazado el mercado negro de divisas, con lo que están en juego los empleos de los “arbolitos” que cantaban “dólar, euro real, cambio”, casi al unísono en la peatonal Florida y otras zonas del microcentro.
Se trata de unos cientos de trabajadores que fueron consiguiendo empleos en un mercado ilegal que floreció desde 2011 a medida que comenzaban a desaparecer muchas casas de cambio y en paralelo se abrían cuevas en la city porteña y en distintas ciudades del país.
Por otra parte, bancos públicos como el Ciudad, Nación y Provincia de Buenos Aires encendieron sus pizarras recién a las 11:30, pero mantuvieron bloqueadas las operaciones de compra y venta de divisas.
Las principales casas de cambio, en tanto, decidieron no abrir la operatoria hasta que el billete verde encontró un punto de equilibrio inicial, tras el levantamiento del cepo cambiario anunciado por el gobierno de Mauricio Macri.
Euros a $16,40 y dólares a $15 fueron los primeros niveles en los que se ubicaron esos billetes al iniciar la rueda de venta al público en algunas casas de cambio, y luego comenzaron a recortar.
Pero al cerrar la jornada, el euro descendió hasta $14,38 pesos y el dólar hasta $14, de acuerdo con los valores de venta a un público que se mostró nervioso y con fuerte incertidumbre sobre cómo era la operatoria y cuál el valor de referencia.
“No estamos vendiendo porque esperamos un valor de equilibrio. Sí puede retirar sus dólares si tiene una caja de ahorro o cuenta corriente denominada en esa moneda”, le respondió a NA un cajero del Santander Río en el microcentro porteño en la apertura de la jornada.
También temprano, en una sucursal del Banco Francés solicitaban aún el número de referencia de autorización de compra de divisas que emitía hasta el miércoles la AFIP y que, según el Gobierno, ya no hacía falta.
Cajeros del Banco Patagonia, en tanto, informaban a sus clientes que no venderían divisas al menos hasta que el Banco Central “ajuste bien todo” el sistema y termine de intervenido en el mercado mayorista, para que se estabilice un precio único.
La confusión reinó tanto entre los ahorristas e inversores, como entre los empleados de bancos y casas de cambio, quienes expresaron que las operaciones congeladas se debían a “la actualización del sistema informático de comercialización”.
