En la Escuela 10, el personal directivo, equipo de gestión y padres piden que se reincorpore a un portero despedido hace pocos días, justo antes de quedar en planta permanente. Se trata de Luis Altuna, quien pidió a la Gobernadora revea su situación. De no haber respuesta, la semana que viene habría un encadenamiento y cierre del establecimiento. “Don Luis no es un número más”, dijo la directora del colegio.
RIO GRANDE.- Luis Altuna es portero de la Escuela 10 hace tres años, y en 2015 había logrado el ingreso a planta permanente, pero pocos días antes de quedar firme su planta fue despedido, como otros tantos trabajadores en la misma situación. Ayer Luis reclamó en la escuela, y es apoyado por el personal directivo y padres del establecimiento.
Se trata de un reclamo que, desde esta mañana, se está llevando de manera silenciosa por parte de un grupo de padres del establecimiento, la misma escuela que la semana pasada sufrió la caída de un techo por la cual milagrosamente nadie salió lesionado.
Gustavo, uno de los padres presentes indicó que “soy integrante además de la comisión directiva de ATE y acompañamos a los trabajadores en este caso a Luis Altuna a quien le faltaban 30 días para tener la estabilidad laboral y el gobierno de turno se pudo arrogar la posibilidad de rescindir la estabilidad”. Nosotros hemos ido a la justicia a hacer el trámite de reconsideración de la reincorporación y el juzgado ha fallado que no da a lugar y conforme a derecho está bien echado”.
Y manifestó que “acá lo que no se tiene en cuenta es que se está dejando a una persona sin trabajo, y en particular el compañero Luis tiene el acompañamiento del cuerpo directivo de la escuela y los papás, todos pedimos la reincorporación de él”.
Además indicó que “si esto no tiene una solución en el corto tiempo él se estaría encadenando a la escuela y no estarían dejando ingresar a nadie al establecimiento, además se profundizaría en una huelga de hambre. Le pedimos a la gobernadora que revea este caso en particular y sabemos que hay más de otros 100 compañeros que están despedidos, al incorporación a planta de los compañeros de planes que de una vez por todas se termine el manoseo con los trabajadores”.
En tanto el propio Luis relató en Fm Líder que “en mi caso hace tres años estoy en la Escuela, cumplía mis funciones todos los días, los directivos son muy buenos y los padres también. Me encontré la sorpresa el 9 de marzo que me dieron la baja, le pido a la señora gobernadora que revea mi situación porque tuve un inconveniente años atrás de perder mi casa, y de a poco estamos construyendo la misma”.
La directora del establecimiento, Patricia Liacoplo, también manifestó su apoyo al portero al señalar que “uno se preocupa por las personas y don Luis no es un número más, cada uno de nosotros somos una persona con una historia atrás familiar, y esto es lo que nos mueve a acompañarlo a don Luis en este pedido yo como directora, el equipo de gestión pero también como personas y compañeros”.
“Más allá de que la ley diga que tiene que tener un año como planta permanente, uno sabe que la gente que ingresó en los planes tienen más de un año, no solo se ven perjudicados por haber trabajado varios años cobrando menos de la mitad de lo que cobra cualquier otro trabajador, para mi es una violación de los derechos humanos porque estamos en una pseudo esclavitud, por qué uno cobra un dinero y otro que hace el mismo trabajo cobra menos”, sumó.
Y remarcó que por un lado está la situación de don Luis “pero si uno lo ve desde el equipo de gestión de la escuela, yo tengo que decir que necesitamos no un Luis, necesitamos cinco, porque nos están faltando cinco porteros. Cuando se levante el paro que espero sea pronto, nos vamos a encontrar con el problema de no poder recibir a la totalidad de los alumnos por falta de personal Pomys”.
Respecto a los problemas edilicios dijo que “hemos tenido respuestas, la gente de Planeamiento se presentó enseguida, revisaron y trabajaron durante el fin de semana, aseguraron los entretechos y hemos pedido informes técnicos para presentar a los papás que estén tranquilos. Con el agua hemos tenido respuestas, yo no me podría quejar en ese aspecto, pero lo único con lo que no estamos teniendo solución es con los vidrios rotos”.
