La mejor en aguas frías

En la segunda parte de la entrevista a Victoria Mori, la mejor representante argentina en competencias de aguas frías, y quien recientemente se ubicara segunda en la competencia de la IISA (entidad que nuclea esta disciplina) en la Antártida.

ANTARTIDA. Victoria Mori, con la bandera del Rotary Club de Capitán Bermúdez.

RIO GRANDE.- “Siempre me había sentido muy bien nadando en el frío, empecé a competir en aguas abiertas, veía que tenía buenos resultados al terminar cada competencia. Y me dediqué a eso. A los 17 -ahora tengo 25- arranqué, con Gustvo D’Andrea, del Club Echesortu, en Rosario, quien sigue siendo mi entrenador. Hice pruebas internacionales, en Rosario, en enero. Aspiré ir a la Santa Fe-Coronda (57 kilómetros), hice la clasificación en los 30 kilómetros (Sauce-Coronda), los que hacen el tiempo pueden largar la carrera larga. El primer año que nadé nos sacaron a la altura de Santo Tomé, por tormenta. Al año siguiente, se suspendió por seguridad, Santa fe estaba inundada. Fui a México, Canadá, en los eventos del Gran Prix de FINA”.

En Canadá
“La carrera con agua más fría es la de San Juan, en Canadá, el agua está a 16/18 grados, como mucho puede llegar a 20 grados, en su momento no estaba permitido el uso de traje de neoprene, solamente el de competencia, hasta los tobillos. Entrené para ese evento, antes hive una de 32 kilómetros, en Paraná, y el 20 de junio de 2015, sin traje de neoprene, con 16 grados (y 9 en el ambiente). Me sentí muy bien, salí después de 3 horas y medio. Un amigo, Sergio Salomone, me mencionó lo de las carreras en aguas heladas, después estuve en Poterrillos (Mendoza), esa fue primera competencia en aguas frías (con el agua a 8 grados), en una laguna, con neoprene, me daba una seguridad. Gané, me gustó el evento y sobre todo, el entorno. Era el único evento nacional, así que tuve que investigar cómo era mundialmente”.

Rumbo a Europa
“Elegí ir a Radev Kralove, en República Checa, fui sola, acá no estaba desarrollada la disciplina, actualmente está en crecimiento, la mayoría de los deportistas compite acá, en invierno.
“El primer contacto fue con Sergio Salomone (nadador de Buenos Aires) me dijo que tenía que ir a República Checa, la campeona de ese año del kilómetro en el Mundial de Murmasrk (Rusia) había sido de aquel país. Entré a la página de la IISA, consulté por el encargado de esa zona, era Ishy Kurina, allá me abrieron las puertas, me dieron la posibilidad de participar, es como que me adoptaron, y volví en los dos siguientes años. Representó a su equipo en la temporada, al Primer Equipo de Praga, en 2017 fui la nadadora más valiosa de ellos”.
“Hay dos circuitos simultáneos, el internacional, de la IISA, y el de República Checa. El local tiene competencia prácticamente todas las semanas, de noviembre a abril, el agua está en 4/5 grados en noviembre, ellos ahí consideran que arranca la temporada de invierno”.
“Este año tuve una beca de la provincia de Santa Fe, por miss actuaciones anteriores. Quedé tercera en el mundial 2018, en la distancia de 450 metros. En 2017 fue tercera, y campeona en mi categoría, en el kilómetro del Mundial de Burhausen (Alemania). La beca es anual, después dependo de la ayuda que se pueda conseguir de algún auspiciante, y de mi familia, que es mi principal sponsor”.

Personal
“Estudio Odontología en la Universidad Nacional de Rosario, a las autoridades de la Facultad le tengo que agradecer muchísimo, siempre me han apoyado en mi carrera deportiva. No tuve problemas con los exámenes cada vez que viajé.
Además, terminé el Curso de Entrenador de Natación.”
“Ahora tengo que armar el futuro próximo. Hace tres años que no paso las fiestas con mi familia, inclusive el 26 de diciembre hay una carrera muy importante en República Checa. El Alfred Nikodemo, frente a la casa de gobierno, en Praga, en el rio goldava, está prácticamente congelado. Tengo muchas ganas de ir, la gente del club al que represento (PKO) me piden que vuelva, lo decidiré”.
“Soy del Rotary Club de Capitán Bermúdez, soy una adquisición nueva, lo conocí gracias un amigo de mi papá, hace un mes y medio. Di charlas, me facilitaron mucho el hospedaje, en Ushuaia y en Río Grande. Llevé la bandera a la Antártida, y con el mensaje de ponerle fin a la Polio”.

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