En Río Grande, las protectoras de animales lanzaron la campaña “Abriguemos a un callejero”

Los perros pueden sufrir hipotermia si están expuestos al frío de manera prolongada.

Comenzó el invierno y las temperaturas bajas afectan no sólo a los humanos y las mascotas también demandan cuidados en este sentido. Además, hay que tener en cuenta los miles de perros que no tienen un lugar a resguardo para pasar la noche y muchas veces, mueren literalmente de frío.

RIO GRANDE.- Comenzó el invierno, con temperaturas bajo cero y hasta nieve. Desde las protectoras de animales de ésta ciudad comenzaron con la campaña denominada “Abriguemos a un callejero”, en la que reciben desde cuchas, hasta polares viejos, para abrigar los refugios de los perros sin hogar.

El post de una de las protectoras dice: “Amigos, son muy bajas las temperaturas y estamos arrancando con la campaña abriguemos un callejero. Estamos buscando polar, queremos abrigarlos y poner mantas en las cuchas. Si tenés polar, frazadas, mantas que no uses. Nos vienen de 10. No dejemos que se mueran de frío!!!”.

Además de las mantas y polares, las protectoras aceptan cuchas, que ya no se usen, debido a que muchos de los perros que están en lugares de tránsito duermen en patios, terrenos o otros lugares a la intemperie.

“Es impresionante la cantidad de animales que duermen atados sin refugios. Ellos pasan frío, hipotermia, dolores en sus huesos. Seamos conscientes. Las temperaturas por la noche llegan a 5, 6, 8 y hasta 10 grados bajo cero”, dijo Victoria, otra de las voluntarias.

Judith, de la protectora Pocas Pulgas, explicó: “En realidad, no es algo de una sola organización. La idea es hacerlo desde la mayoría de las protectoras, en grupo, junto con Guardia, Pocas Pulgas, y otras, y la idea es que los perros que por ahí tenemos nosotras, si es que llega a llover y eso estén abrigados. Así que se pueden comunicar con todas las protectoras, a través de las páginas de Facebook, para ofrecer lo que tengan, generalmente pasamos nosotras a buscarlo”.

La hipotermia

La hipotermia se caracteriza por una temperatura corporal anormalmente baja, y consta de tres fases: leve, moderada y severa. Para un perro, la hipotermia leve es cuando la temperatura corporal ronda los 32°a 35 ° C, la hipotermia moderada va de los 28° a 32 ° C, y la hipotermia grave es cualquier temperatura inferior a 28 ° C.

Cuando sufre hipotermia, el cuerpo de un animal ya no es capaz de mantener la temperatura normal, esto causa una depresión del sistema nervioso central; puede afectar el corazón y el flujo sanguíneo; la respiración y el sistema inmunológico. Pueden producirse latidos irregulares del corazón, dificultad para respirar, y alteración de la conciencia hasta un estado de coma.

En los gatos, la temperatura corporal normal se sitúa por encima de los 38 y 39ºC. La sintomatología de la hipotermia muestra temblores, rigidez muscular y alteración de las constantes vitales. La hipotermia felina requiere un tratamiento urgente.

El abrigo

El médico veterinario Jeremías Sarmiento recalcó que es importante abrigar a los animales, pero teniendo algunos recaudos: “Tanto los perros como los gatos sufren de frío y peligran que les dé una hipotermia, lo mínimo sería una cucha o un reparo para evitar que les dé frío o la lluvia en forma directa. En cuanto a abrigarlos no es una buena decisión si estos animales van a estar siempre con dichas ropas, porque las mismas se humedecen y transmiten más las bajas temperaturas. En caso de animales sanos lo mejor sería alimentar en forma abundante así poseen todos los requerimientos energéticos”, dijo. Y agregó: “El uso de cartones secos como piso para las cuchas es una buena forma de ayudar a mantener el calor, no así los pallets porque se forma una cámara de aire frío por debajo que ayuda a enfriar más el ambiente, y las cuchas si pueden estar protegidas del viento es mejor”.

En las veterinarias también se pueden hacer donaciones para la compra de alimentos, vacunas, esterilizaciones, y demás gastos que afrontan los grupos de protectoras de la ciudad, que son autónomos y no reciben subsidios de entidades privadas o públicas.