En la década se redujo el porcentaje de hogares con más de una necesidad básica insatisfecha

Un informe del Indec sobre el crecimiento de los indicadores sociales revela que disminuyeron las necesidades básicas insatisfechas del 14,3 % en 2001 a 9,1% en el último censo y que a nivel nacional hay de 18,8 % al 15,2 % menos de hogares con más de una de esas mediciones de situación de pobreza.
BUENOS AIRES.- El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) presentó el informe “Población e inclusión social en la Argentina del Bicentenario. Indicadores demográficos y sociales”, una publicación que tiene como objetivo central el análisis de la situación y evolución social del país en las últimas décadas con un especial énfasis en los indicadores que dan cuenta del nivel de inclusión social de la población.

El informe producido por la Dirección Nacional de Estadísticas Sociales y de Población se realizó mediante un análisis comparativo de las principales características de la población, los hogares y las viviendas, informó el organismo a través de un comunicado.

La información proviene de relevamientos realizados por el Indec, tales como los censos de población y viviendas, encuestas especiales, y por otros organismos públicos. Se encuentra organizada en áreas temáticas que apuntan a una descripción integral de la realidad social.

Se consideran hogares con Necesidades Básicas Insatisfechas a aquellos que presentan al menos una de las siguientes condiciones de privación:

NBI 1. Vivienda: es el tipo de vivienda que habitan los hogares que moran en habitaciones de inquilinato, hotel o pensión, viviendas no destinadas a fines habitacionales, viviendas precarias y otro tipo de vivienda. Se excluye a las viviendas tipo casa, departamento y rancho.

NBI 2. Condiciones sanitarias: incluye a los hogares que no poseen retrete.

NBI 3. Hacinamiento: es la relación entre la cantidad total de miembros del hogar y la cantidad de habitaciones de uso exclusivo del hogar. Operacionalmente se considera que existe hacinamiento crítico cuando en el hogar hay más de tres personas por cuarto.

NBI 4. Asistencia escolar: hogares que tienen al menos un niño en edad escolar (6 a 12 años) que no asiste a la escuela.

NBI 5. Capacidad de subsistencia: incluye a los hogares que tienen cuatro o más personas por miembro ocupado y que tienen un jefe no ha completado el tercer grado de escolaridad primaria.

Los indicadores más relevantes de esta evolución son el aumento de la esperanza de vida total, la reducción de la brecha de la esperanza de vida de hombres y mujeres y el pronunciado descenso de la mortalidad infantil, en una tendencia similar a la que se verifica actualmente en los países con un elevado desarrollo socioeconómico.

El proceso de urbanización de la población en la Argentina continúa en ascenso, aunque a ritmo más lento que en décadas anteriores, según lo relevado en el último censo de población: nueve de cada diez habitantes del territorio nacional viven en un área urbana; este avance de la urbanización genera una demanda creciente de inversión y planificación de políticas públicas orientadas al desarrollo de infraestructura, servicios públicos y ordenamiento de las ciudades.

El porcentaje de los inmigrantes internacionales con respecto a la totalidad de la población se mantuvo estable, mientras que la composición de la población extranjera se modificó en las últimas décadas; creció el aporte poblacional de los países limítrofes y del Perú y disminuyó el peso poblacional del resto de los países, especialmente de los migrantes españoles e italianos.

La población mayor de 65 años posee cobertura casi universal a través de obras sociales debido a que el sistema de protección social a la vejez en la Argentina abarca tanto la provisión de haberes económicos tras el retiro laboral como la cobertura de salud a través del PAMI.

La cobertura de salud a través de la seguridad social aumenta en las provincias en las que el mercado laboral está más formalizado.

A nivel total del país, en 2010 se evidencia una reducción importante de 0,7 puntos porcentuales del analfabetismo respecto a 2001.

Asimismo, la tasa de analfabetismo bajó en todas las provincias y casi todos los grupos etarios presentan porcentajes de asistencia al sistema educativo formal que superan el 80 por ciento.

El informe del INDEC señaló como novedosa la amplia cobertura de los niveles iniciales, que se observa en el alto porcentaje de asistencia escolar registrado en los niños de 4 y 5 años.

Asimismo, destacó el significativo aumento de los niveles de ocupación del mercado laboral argentino en la última década, siendo éste 2,4 veces superior al crecimiento de la Población Económicamente Activa y 5,3 veces superior al crecimiento de la población de 14 años y más.