En el sector antártico se registraron lluvias y temperaturas de hasta 9 grados, en pleno invierno

A pesar de los inusuales registros, los profesionales del Centro Meteorológico Marambio advierten que en lo que va del invierno 2018 las temperaturas se han comportado dentro de lo esperable para el periodo medio. Hasta el momento, las temperaturas más extremas fueron registradas en el mes de julio.

RIO GRANDE.- Lluvias, periodos prolongados sin precipitaciones y temperaturas más altas de las normales son algunos de los fenómenos registrados por el centro Meteorológico Marambio durante este invierno en el Sector Antártico Argentino. Hasta el momento, las temperaturas más extremas fueron registradas en el mes de julio con una temperatura real de -33° y sensación térmica de -54° el 1° de julio y de 9° el 20 de julio.

El capitán Mauricio Nicolás Laurizi, jefe del Centro Meteorológico Marambio, en diálogo con El Sureño, explicó que “el clima antártico se caracteriza por su variabilidad, sin embargo, se están observando datos extremos con una frecuencia que antes no se observaba. Por ejemplo, una temperatura de 9 grados en el mes de julio es algo anecdótico, que sale de lo usual. También venimos observando con frecuencia al menos en la zona norte de la península, precipitaciones en forma líquida (lluvias) cosa que antes se restringía solamente al periodo de verano. Ahora, se puede observar prácticamente en cualquier periodo del año. Se han registrado lluvias en estaciones como Carlini y Esperanza durante el semestre invernal, es algo inusual. De todas maneras las temperaturas se han comportado dentro de lo esperable para el periodo medio, con algún que otro dato extremo como estos 9 grados del mes de julio”.

El Centro Meteorológico Marambio se encarga entre otras cosas de recabar la información procedente de las seis estaciones meteorológicas permanentes que el Servicio Meteorológico Nacional tiene montadas en el Sector Antártico Argentino. Realizan pronósticos para toda la región antártica argentina y realizan mediciones de alta atmósfera en particular el valor de ozono tanto a nivel estratosférico como a nivel superficial. Además, el Centro Meteorológico Marambio también cuenta con una estación de medición de variación de campo magnético terrestre en la Base Orcadas.

Laurizi agregó que “suele pasar con frecuencia que tenemos prolongados periodos secos alternados con abundante precipitación”. Según indicó, el agua que se consume en la base proviene de las precipitaciones y nieve que cae y de una laguna artificial donde recogen el excedente para sacar el agua sanitaria. “Por eso, cuando pasamos por periodos secos prolongados, debemos informarlo para que no se vea comprometida la elaboración de agua”

Vuelos logísticos

La Base Aérea Vicecomodoro Marambio constituye el principal punto de apoyo argentino, a través del transporte aéreo, con capacidad para brindar a las bases antárticas durante todo el año evacuación sanitaria, búsqueda y rescate, traslado de personal y cargas y lanzamiento de cargas y correspondencia.

Cuenta con dos pistas de aterrizaje. Una, la originaria, de 1200 m de largo por 30 m de ancho y la otra, inaugurada en 2015, con una longitud de 1600 m por 45 m de ancho. Marambio es la única base antártica que cuenta con dos pistas de aterrizaje, siendo además, esta nueva, la más extensa de la Antártida.

“Aquí en Marambio hay un personal que es dotación permanente que está todo el año desde fines de octubre o principios de noviembre hasta la misma fecha del año siguiente, y personas que vienen por menos tiempo, que realizan comisiones temporarias. En meteorología hay un grupo permanente y otro que viene de apoyo. Yo estoy realizando una comisión temporaria en este momento, hasta fin de año. Eso lo permite esta base por tener una conexión más frecuente con el continente, a través de los vuelos logísticos antárticos que hace la aeronave Hércules”, explica el capitán Laurizi.

Durante la campaña de invierno suele haber vuelos logísticos cada un mes y precisamente el sábado, el personal de la base tuvo un día movido debido a la llegada de un Hércules. “En esos vuelos logísticos se realiza una serie de cruces antárticos, desde la Base Militar de Río Gallegos a la Base Marambio. Suelen ser entre 5 y 6 cruces cada vez que viene el avión cuya tarea es hacer el reabastecimiento de combustible, víveres, carga y traslado de personal. En verano en cambio, tenemos vuelos logísticos cada 15 días y por periodos prolongados de tiempo porque además de todo el transporte de carga y reabastecimiento hay un mayor despliegue por la actividad científica que se desarrolla en el sector antártico, que de aquí, son derivados al resto de las bases antárticas”.

Hay algunas bases a las que se llega solo por barco y el viaje se realiza sólo una vez al año. “Esas personas permanecen en la base durante un año y al año siguiente los van a buscar. Y en el transcurso del año no ven a otras personas que no sean ellos mismos. Eso ocurre en la Base Belgrano II, en Orcadas y Base San Martín. En las otras bases sí se puede hacer traslado de carga y de personal durante todo el año, a través de Twin Otter y helicópteros”.

Cuando llega un Hércules

Todos los servicios trabajan intensamente preparando todo para que a la llegada del vuelo logístico, el Hércules pueda aterrizar en forma óptima. Eso también exige un esfuerzo del Centro Meteorológico Marambio para la verificación de las condiciones de forma tal que el vuelo pueda operar. “Hay que tener en cuenta que acá no tenemos aeródromos alternativos -indica Laurizi-. Si un avión despega de Río Gallegos, la única posibilidad que tiene es aterrizar en Marambio, salvo que las condiciones meteorológicas sean lo suficientemente malas para que el avión pueda dar la vuelta en algún momento para retornar hacia Río Gallegos. Pero hay un punto que se denomina “de no retorno” a partir del cual sí o sí tiene que aterrizar en Marambio. Eso demanda que nosotros tengamos que hacer un esfuerzo extra de apoyo meteorológico a ese tipo de vuelos”.

En general, no se permite que la pista permanezca con una cobertura de nieve importante. “Después de un temporal como el que tenemos hoy, con viento blanco, inmediatamente el personal está trabajando para despejar la pista por la sencilla razón de que después queda el aeropuerto inoperable y no se pueden efectuar los traslados necesarios”.

En Marambio, la cantidad de personal estable se encuentra dentro de las 70 personas que realizan tareas específicas de cada servicio. “La razón de la presencia de todos nosotros acá, por un lado es la soberanía, el reclamo de nuestro país por esta región. Y fundamentalmente es la actividad científica tanto del clima de la zona como aspectos ambientales del sector antártico. Todo eso lleva a la presencia de Argentina en esta región. Este es un ecosistema frágil que no está preparado para que haya ciudades en esta zona, entonces lo que se busca es entender y comprender la complejidad que tiene este continente”.